MIAMI, Estados Unidos. – El congresista republicano por Florida Matt Gaetz dijo este miércoles durante una audiencia ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes que el presidente Biden debería usar la fuerza militar para eliminar las presuntas instalaciones militares chinas en Cuba.
“Apoyo una autorización para el uso de la fuerza militar para eliminar los activos chinos en Cuba”, dijo Gaetz, un fuerte crítico de las ambiciones globales de China, mientras el Comité de Servicios Armados debatía las enmiendas a la Ley de Autorización de Defensa Nacional, según reportó Fox News.
Gaetz también compartió en Twitter un fragmento de su intervención ante el Comité este miércoles.
“Deberíamos estar mucho más preocupados de que China esté convirtiendo funcionalmente a Cuba en un portaaviones estacionario frente a la costa de Florida”, dijo.
A principios de este mes, el congresista cubanoamericano Carlos Giménez, republicano por Florida, también advirtió a la administración Biden que la presencia de una base de espionaje china en la Isla representaría una “amenaza inminente” para EE.UU., e instó a la Casa Blanca a tomar medidas para reforzar la seguridad nacional.
“Como miembro del Congreso por el distrito más al sur de Estados Unidos, que incluye la totalidad de los Cayos de Florida, esta base de espionaje representa una amenaza directa para mis electores y para los millones de turistas que visitan el sur de Florida cada año”, dijo Giménez.
“La China comunista está socavando de manera proactiva a Estados Unidos en todo el hemisferio occidental e insto a esta Administración a construir una estrategia sólida, integral y conveniente para contrarrestar la influencia maligna del PCCh en los estados vecinos”, agregó.
Este miércoles, The Wall Street Journal (WSJ) informó que los servicios de Inteligencia de Estados Unidos, durante la administración del expresidente Donald Trump, rastrearon a trabajadores de las empresas chinas de telecomunicaciones Huawei y ZTE que ingresaban y salían de instalaciones sospechosas de albergar operaciones de espionaje en Cuba, según personas familiarizadas con el asunto citadas por el medio estadounidense.
La Inteligencia de Estados Unidos tuvo sospechas de que los gigantes chinos de las telecomunicaciones, Huawei y ZTE, estarían desempeñando un papel en la expansión de las capacidades de espionaje de Beijing en la Isla, precisó el WSJ.
Un día antes, el mismo periódico había indicado que los gobiernos de Cuba y China estarían negociando el establecimiento de una instalación de entrenamiento militar conjunto en la Isla. De acuerdo con funcionarios estadounidenses tanto de la actual administración como de la anterior, la información de que China podría transportar tropas y realizar operaciones de seguridad a solo 160 kilómetros de la costa de Florida ha generado alarma en EE.UU.
Siguiendo el reporte del WSJ, las conversaciones sobre la instalación de la base de entrenamiento militar se encontrarían en una etapa avanzada, aunque no habrían concluido. La administración del presidente Joe Biden, por su parte, se habría comunicado con funcionarios del régimen cubano para tratar de detener el acuerdo entre la mayor de las Antillas y el gigante asiático.
La agencia inglesa Reuters reportó que este martes, hablando en una conferencia de prensa en Londres después de concluir su viaje a Beijing, el secretario de Estado de EE.UU., Anthony Blinken, confirmó las “profundas preocupaciones” de su gobierno sobre “las actividades militares o de inteligencia de la República Popular China en Cuba”.
“Esto es algo que vamos a monitorear muy, muy de cerca, y hemos sido muy claros al respecto. Y protegeremos nuestra patria, protegeremos nuestros intereses”, apuntó el secretario de Estado.
La pasada semana Washington confirmó que había sospechado durante mucho tiempo que China realizaba una operación de recopilación de inteligencia en un pueblo cercano a La Habana, el cual ha sido identificado como Bejucal.
Por su parte, el régimen chino ha negado que utilice el territorio cubano como base de espionaje. Este propio martes, de acuerdo con un reporte de Telesur, un vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, afirmó que su gobierno no tenía conocimiento de la supuesta negociación entre Beijing y La Habana para la instalación de una base militar para entrenamiento conjunto.
El pasado 8 de junio, el WSJ reveló que los gobiernos de Cuba y China habían cerrado un pacto secreto para establecer una estación de monitoreo electrónico en la Isla. La instalación tendría la capacidad de recolectar información electrónica del sureste de Estados Unidos, una región que cuenta con múltiples bases militares, así como de vigilar el tráfico marítimo.
Aunque inicialmente el reporte de WSJ generó polémica por el uso de fuentes no identificadas, y tras calificarlo de “inexacto”, la Casa Blanca confirmó que China utiliza bases secretas en Cuba para espiar a EE.UU.
El régimen de la Isla, por su parte, ha negado la presencia de la presunta base de espionaje en su territorio.