MIAMI, Estados Unidos. — El número de cubanos que ingresaron a Estados Unidos a través de la frontera sur cayó notablemente el pasado mes de enero, según las últimas cifras publicadas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CPB, por sus siglas en inglés).
En total, fueron 11 893 los migrantes irregulares de la isla detenidos por las autoridades estadounidenses, una cifra muy inferior a los 44 078 registrados en diciembre de 2022.
En lo que va de año fiscal 2023 (iniciado el 1 de octubre del pasado año), CBP ha contabilizado el ingreso de 121 733 cubanos a través de la frontera sur, síntoma del éxodo masivo que sufre la isla caribeña. De ese total, 87 084 son adultos solteros, 32 666 llegaron acompañados de sus familiares, 1 156 fueron menores de edad sin acompañamiento y 827 menores de edad en compañía de adultos.
Desde octubre de 2021 arribaron al país norteño 346 340 cubanos, una estadística sin precedentes en la historia de las migraciones entre ambos países.
La caída del número de nacionales de la isla que ingresaron a través de la frontera obedece a la nueva política migratoria impulsada por la administración de Joe Biden, que busca promover el ingreso a EE. UU. de manera legal, ordenada y segura, pero cerrando el paso a los migrantes irregulares.
Ante el cierre de la frontera, la alternativa para cubanos, haitianos, venezolanos y nicaragüenses es la nueva política de parole humanitario lanzada por Washington el pasado 5 de enero.
Los solicitantes al parole —al que también pueden aplicar personas que se encuentren en condición irregular en terceros países— deben contar con un patrocinador en EE. UU. que demuestre solvencia para asumir a los beneficiarios de esa política.
Se estima que solo en enero de 2023 alrededor de 1 400 ciudadanos de la isla caribeña lograron ingresar a territorio estadounidense gracias al nuevo beneficio.