LA HABANA, Cuba. – “Ciudad Corona” es el nuevo proyecto artístico del grafitero Yulier P, quien se propone dibujar la angustia y el miedo colectivo en el contexto de la pandemia de coronavirus que azota a la Isla.
En esta ocasión, Yulier utilizó el solar yermo de una vivienda en el municipio Diez de Octubre, cuyos muros, fachada y cercado se han convertido en el soporte de las nuevas obras del artista.
La labor del grafitero es conocida por la expresividad de los rostros que dibuja, calificados por la crítica como “retratos del alma”. En las pinturas de “Ciudad Corona”, Yulier sobredimensiona el expresionismo con el que está acostumbrado a describir la realidad nacional. El artista confesó a CubaNet que, en medio del aislamiento, se basó en el avance de la pandemia a nivel mundial y nacional para idear sus nuevos grafitis.
“Generalmente mi obra habla del país, pero ahora intento abarcar el sufrimiento global, el dolor que causa la muerte por la pandemia de coronavirus en el mundo. En esta especie de capilla quiero dejar el sentido de soledad y desesperación que causa el aislamiento, el saber que todavía no hay una cura para la enfermedad que causa la muerte de mucha gente”.
Hasta el momento la galería improvisada cuenta con una serie de ocho pinturas terminadas. Otra más está pendiente de los retoques finales.
En el nuevo proyecto, el grafitero se apoya en las tonalidades del color negro para expresar el dolor de los seres humanos ante el avance de la COVID-19. Hasta el momento, el graffiti titulado “El miedo de la salvación” es el único donde resalta el rojo, un llamado de atención sobre los efectos letales del nuevo coronavirus.
“La muerte se está llevando a muchas personas sin misericordia; eso quiero dejarlo reflejado en las obras sin colores, que para mí significan ausencia de felicidad”.
Yulier P desconoce si el proyecto tendrá progresos en los próximos días, puesto que el avance de la pandemia podría llevar al Gobierno a declarar toque de queda en todo el país, como último recurso de contención de la COVID-19.
Previendo el encierro, el artista adelantó la pintura del graffiti titulado “Hope”, su primera luz de optimismo en un ambiente desánimo.
“A pesar de la imagen terrible de la muerte, que no distingue las clases sociales, existe una llama de esperanza; la expreso con el símbolo de la flor que, en ocasiones, sostienen mis personajes”, explicó el artista.
Justo donde la línea del tren atraviesa la Calzada de Luyanó el grafitero puso en marcha el proyecto que promete dejar una huella artística del paso del coronavirus por Cuba.
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