MADRID, España.- Surgido en los talleres de Diario de la Marina, el 25 de septiembre de 1935 salió por primera vez el periódico ¡Alerta!, con 16 planas de pequeño formato. Dirigido por Jorge Fernández de Castro, el editorial en la página tres, “¡Alerta! y su programa”, indicaba: “Nos es indiferente que triunfe tal o cual tendencia, siempre que no nos traiga aparejadas dislocaciones sociales”.
Autodenominado al principio “Diario Informativo”, fue uno de los de mayor circulación en el país. Como casi toda la prensa de la época, además de titulares de diferentes temáticas en primera plana, sacaba otros sensacionalistas. El 24 de octubre de 1935, por ejemplo, resaltaba: “Aún está sin identificar el ahorcado” y “Muy grave una joven por las dentelladas de un perro”.
A finales de enero de 1949 pasó a dirigirlo el periodista Ramón Vasconcelos (1890-1965), que ya había fundado varios diarios, colaborado en otros tantos y se desempeñara como Senador y Ministro de Educación Pública, e intervino en la creación de la Escuela Profesional de Periodismo Manuel Márquez Sterling.
Para esa fecha ya ¡Alerta! tenía el llamado tamaño de sábana; contaba entre sus columnas —aparte de “Entreactos”, de Vasconcelos—, con “La Habana por dentro”, de Fray Bartolo; “El Día Social” por Julio de Céspedes, y “Sociedad”, por Pablo Álvarez Cañas, esposo de la escritora Dulce María Loynaz, quien también hacía la crónica social para periódicos como Diario de la Marina, El País y El Crisol. Y Eladio Secades (1908-1976) publicaba sus célebres humorístico-costumbristas “Estampas de la Época”.
De los talleres de La Marina ¡Alerta! pasó a imprimirse a la calle Carlos III. Competía con El Crisol, diario del lunes al mediodía, en que no salían los matutinos y, por tanto, sus noticias tenían la primicia.
¡Alerta! fue clausurado el propio 1.º de enero de 1959. El día 5 Diario de la Marina titula: “¡Ocupado el periódico Alerta!”. El escritor, periodista y político español exiliado en Cuba que para esa fecha lo dirigía, Emilio Palomo (1898-1964), abandonó el país. Y en los talleres de ¡Alerta! comenzó a imprimirse el periódico Revolución.