MIAMI, Estados Unidos. — El 17 de mayo de 2022, en un hospital de París, dejó de latir el corazón de uno de los músicos más innovadores del siglo XX. Evángelos Odysséas Papathanassíou, más conocido como Vangelis, perdió la batalla contra el COVID-19 poco después de haber cumplido 79 años.
Compositor prolijo, tecladista virtuoso y dado a la experimentación, inició su carrera en la banda de pop psicodélico Aphrodite´s Child, liderada por su primo, el cantante y bajista Demi Roussos. Su creatividad, sin embargo, lo hizo adentrarse en los predios de la música instrumental, en particular la electrónica, el new age y el rock progresivo.
Esa arriesgada elección que parecía colocarlo en la acera opuesta al éxito comercial, fue magistralmente complementada con una gran inteligencia a la hora de componer su repertorio, meridiano entre la densidad propia de las grandes orquestaciones, la riqueza de géneros musicales como el rock y el jazz, y las infinitas posibilidades que surgían de la experimentación con sintetizadores analógicos.
Vangelis fue de los poquísimos autores de música instrumental que ganó popularidad y éxito, sobre todo gracias a las bandas sonoras de filmes como Carrozas de fuego (1981), Blade Runner (1982) y 1492: La Conquista del Paraíso (1992), filmes que hoy son considerados clásicos, en buena medida por la excelente música del griego.
La obra de Vangelis es de difícil catalogación. Sus composiciones se enmarcan dentro de una vocación sinfónica, proponiendo atmósferas envolventes e intensas, con dimensiones melódicas muy accesibles para el oyente promedio. Se valió de un amplio espectro sonoro que incluía arreglos corales y orquestales, algunos derivados de sus raíces folclóricas, con énfasis en la percusión que no solía utilizar de forma reiterativa, perpetuando un ritmo determinado; sino a través de cambios sutiles y constantes que apuntan a momentos climáticos intimistas o jubilosos, también grandiosos y solemnes.
Compuso, además, música para series de televisión, obras de teatro en versiones contemporáneas y ballets. Su discografía es la mejor evidencia del genio que fue, calificado por la crítica como un pionero de la vanguardia de la música electrónica que cobraría auge en el decenio de 1970. Para comodidad del público, siempre atento a las etiquetas, Vangelis suele ser catalogado como un músico de corte new age o, de forma más general, un músico clásico contemporáneo.
A un año de su desaparición física, su obra sigue siendo igualmente admirada por su excelente factura, además de su mística y espiritualidad.