LA HABANA, Cuba, 10 de diciembre de 2013, Augusto César San Martín/ www.cubanet.org.- La vivienda de Antonio Rodiles, líder del grupo independiente Estado de Sats, donde a partir de hoy y hasta mañana debe celebrarse el Primer Encuentro Internacional sobre Derechos Humanos y Pactos de la ONU, amaneció sitiada por la policía y agentes de civil. La calle 3ra., a partir del hotel Copacabana, está cerrada.
Alrededor de las nueve de la mañana, este reportero pudo comprobar el fuerte dispositivo instalado con el fin de impedir que opositores políticos, tanto de dentro de la isla como los que han podido llegar desde el exterior, participen en la jornada.
El director de Estado de Sats y de la campaña Por otra Cuba ha dicho que es la primera vez que se intenta organizar un evento de estas características, en el que se abordará el tema sobre la ratificación de los pactos de la ONU sobre derechos humanos firmados por el gobierno de Cuba.
Este reportero, a bordo de un taxi, intentó en vano llegar hasta la vivienda, ubicada en el barrio de Miramar. El auto fue desviado. Desde las calles 3ra y 42 está la policía manipulando el tráfico. Hay agentes en las esquinas, con personal de civil. Autos microbuses de la Seguridad del Estado están situados en las entrecalles.
El frente de la casa de Rodiles está desierto pues está cerrada la calle 1ra. Los autos que llegan por la vía del hotel Copacabana son desviados.
El circulo social/obrero colindante a la casa de Rodiles tiene altavoces con la música de Silvio Rodríguez muy alta. El audio se escucha en la calle 3ra.
Los pocos participantes que pudieron llegar días antes no pueden salir de la vivienda, para evitar ser detenidos. Junto a ellos se encuentra el trovador Boris Larramendi, del grupo cubano, radicado en España, Habana Abierta.
Larramendi viajó expresamente para el Encuentro y tendrá a su cargo la clausura, fechada para mañana día 11.
El evento desde dentro
LA HABANA, Cuba, 10 de diciembre de 2013, Camilo Ernesto Olivera/ www.cubanet.org.- Finalmente, y contra todo pronóstico, no hubo acción directa de la policía contra el organizador, Antonio Rodiles, acusado ayer de una infracción de tránsito sin que verdaderamente la hubiera cometido. La sesión inicial del Primer Encuentro Internacional sobre Derechos Humano pudo celebrarse sin mayores contratiempos.
La asistencia de público no ha sido la esperada, solo una veintena de participantes pudo acceder, casi ninguno del exterior del país. Pero sí medios de prensa extranjeros y de embajadas acreditados en la isla, como Televisión Española que realizó un reportaje sobre lo que estaba sucediendo.
El primer panel estuvo a cargo del investigador Walfrido López y versó sobre derechos humanos y nuevos medios. López presentó videos sobre medios que desde fuera siguen el tema Cuba: entrevistas a directores y editores de prensa.
En lo adelante se espera un panel sobre derechos humanos en América Latina, y otro sobre violencia institucional de género en Cuba.
También continúa expuesta una muestra de carteles del evento y para mañana está programado el concierto con el trovador Boris Larramendi, llegado desde Madrid.
Como interferencia, el gobierno, a través de la Seguridad del Estado y de sus organizaciones de masas, ha montado una especie de Plan de la Calle frente a casa de Rodiles. Niños que no asistieron hoy a clases han sido utilizados para una fiesta con música y merienda, justificando el cierre del tránsito en la vía.
También, el círculo social/obrero conocido como La Copa, ubicado en calle Primera y 42, se utiliza como puesto de mando de la policía política.
Desde temprano se escuchan canciones de los trovadores oficialistas Silvio Rodríguez y los del dúo Buena Fe.
El operativo recuerda la época del General Abrantes, Ministro del Interior a cargo de los actos de repudio a ciudadanos que intentaban marcharse del país. Las técnicas de asedio son las mismas, pero sin lanzamientos de huevos.
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