LA HABANA, Cuba. – Luis Miguel Alarcón Martínez y Daniel Álvarez González, los jóvenes cubanos que permanecen encarcelados por las protestas ocurridas en el municipio de Caimanera el pasado 6 de mayo, fueron trasladados este 2 de noviembre a un destacamento de reclusos sancionados en la Prisión Provincial de Guantánamo, conocida como El Combinado.
Según contó a CubaNet el reportero independiente Yeris Curbelo Aguilera, Luis Miguel Alarcón Martínez le notificó a su madre, Victoria Martínez Valdivia, a través de una llamada telefónica que tanto él como Daniel fueron trasladados al destacamento 3-C, de máxima severidad, donde se encuentran los reos que ya han sido condenados.
Los dos manifestantes, quienes dieron inicio a las protestas en Caimanera y los únicos que se encuentran actualmente en prisión acusados de desorden público, permanecían en el destacamento de “pendientes”, en espera de ser llevados a un tribunal o de un cambio de medida cautelar.
“Es una injusticia que estoy denunciando porque estos dos jóvenes no tienen por qué estar en un destacamento de reos sancionados, cuando ellos aún están pendientes a juicio. Es una violación del órgano penitenciario de la prisión de Guantánamo y una violación de la dictadura cubana en contra de los presos políticos”, dijo Curbelo Aguilera a CubaNet.
Asimismo, el reportero comunicó que la situación de los manifestantes dentro del penal eran críticas, pues debido a la golpiza propinada por agentes de las fuerzas de élite conocidas popularmente como Boinas Negras el día de las protestas populares, Daniel Álvarez González está presentando problemas en los riñones, “a tal punto que ha orinado con sangre”.
“Por otro lado, Luis Miguel aún tiene uno de sus dientes desprendido, también por la golpiza que le propinaron las tropas represivas el 6 de mayo, así lo informó Victoria Martínez, su madre”, refirió Curbelo.
Recientemente, se conoció que Luis Miguel y Daniel se encontraban enfermos y sin medicamentos, debido a un brote diarreico en El Combinado de Guantánamo. El abogado de ambos jóvenes ha solicitado en tres ocasiones un cambio de medida cautelar ―de prisión preventiva a prisión domiciliar― pero Fiscalía ha rechazado estas solicitudes.