LA HABANA, Cuba. – El 23 de octubre del presente año el segundo jefe del Combinado de Sandino, mayor Yosvany Guzmán Moreno, junto con el teniente Luis Enrique Corvea Camejo, jefe de Orden Interior, efectuaron una requisa al preso político Yasser Fernando Rodríguez González, según denunció vía telefónica el propio recluso desde el centro carcelario pinareño.
Rodríguez González dio a conocer que la medida represiva fue ejecutada por orden del jefe de la prisión, teniente coronel Euclides Reloba Baños. De igual modo detalló que, como resultado del registro, le confiscaron varios artículos religiosos (tres botellas plásticas con cenizas, tierra y piedras).
El prisionero político aclaró además que dichos objetos no constituían violación del reglamento penitenciario ni habían sido incautados en inspecciones anteriores. Sin embargo, según amplió, en esta ocasión los militares alegaron que el motivo de la confiscación era evitar que el prisionero empleara esos artículos para hacer un cartel contra el gobierno el próximo 25 de noviembre, aniversario de fallecimiento de Fidel Castro y fecha en que Rodríguez González cumplirá tres años tras las rejas.
De acuerdo con el preso político, las autoridades penitenciarias lo amenazaron con encerrarlo en régimen de aislamiento desde el día 20 para evitar que lleve a cabo cualquier posible acto de protesta.
Entre los artículos incautados se encuentra además un short de color gris, con la justificación de que, independientemente de lo establecido en el Reglamento de Cárceles y Prisiones, en ese establecimiento penitenciario además del uniforme de la prisión solo se permite usar ropa blanca.
La inspección dirigida contra Rodríguez González estuvo motivada, de acuerdo con el propio prisionero, por la delación de un preso común, quien, presuntamente gracias a la acusación, pudo conseguir que le otorgaran permiso para salir a trabajar fuera de la prisión.
A pesar de las múltiples arbitrariedades y violaciones reportadas por los reos desde el Combinado de Sandino, la unidad fue premiada con el primer lugar durante una inspección de la Dirección de Cárceles y Prisiones efectuada a finales de octubre, según denunció anteriormente el propio Rodríguez González.