Publicado el 28 de febrero de 2002 en
El Nuevo Herald.
Cientos de detenidos en La Habana
By Rui Ferreira. El Nuevo Herald.
La policía cubana ha arrestado discretamente a centenares de personas
que ayer merodeaban o se dirigían hacia la embajada de México en
La Habana, informaron fuentes disidentes en la isla.
''Esos arrestos son muy silenciosos. Están deteniendo como en una
milla a la redonda de la embajada. Mayormente son familias de Güines y
localidades al sur de La Habana que escucharon la noticia por radio'', dijo el
opositor Elizardo Sánchez Santa Cruz, de la ilegal Comisión Cubana
de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN).
Sanchez añadió telefónicamente desde la capital cubana
que ''ni el gobierno ni ningún funcionario mexicano tiene
responsabilidades en este nueva crisis de refugiados en embajadas'' acreditadas
en la isla.
''Rechazamos el uso de la fuerza por parte de ciudadanos cubanos o de otra
nacionalidad para buscar refugio o asilo en embajadas lo cual pone en peligro
sus vidas, las de agentes de autoridad y periodistas y otras personas
inocentes'', dijo.
El disidente coincide con Washington en que "las causas de este nuevo
acto desesperado para escapar de Cuba a como dé lugar hay que buscarlas
en la situación de creciente crisis económica, política y
social y de derechos humanos que agobia a la gran mayoría de los cubanos
en la isla''.
Las detenciones ocurrieron después que 21 personas, entre ellas tres
menores de edad, penetraron violentamente, en las últimas horas del miércoles,
en el recinto de la embajada mexicana después que varias de ellas
estrellaron un autobús contra el muro exterior de la sede y lo derribaron
parcialmente.
El ómnibus Mercedes Benz azul y blanco, de la ruta pública P1,
se estrelló a las 9:45 p.m. contra la entrada principal de la embajada, y
de inmediato algunas personas que se encontraban en los alrededores se
precipitaron hacia el interior de la sede, pero la mayoría no pudo entrar
pues unos 40 miembros de la policía se lo impidió, dijo una fuente
desde La Habana.
Anteriormente en la noche del miércoles, corresponsales extranjeros
habían acudido al lugar indagando sobre versiones que daban como cierto
que un autobús se había introducido en el recinto.
Poco menos de dos horas antes del incidente, el encargado de negocios de la
embajada Andrés Ordóñez desmintió la noticia y llamó
la atención a la cantidad de rumores que circulaban por la ciudad desde
horas tempranas.
'Fue una provocación del gobierno cubano'
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
El incidente de la embajada mexicana en La Habana constituye una provocación
del régimen castrista para crear una situación límite que
obligue a una definición del gobierno de Vicente Fox, aseguró ayer
en Miami un ex oficial de la inteligencia cubana.
''Esto ha sido una provocación evidente de Fidel Castro para crear
una situación extrema y lograr que México se defina y se pronuncie
a su favor'', afirmó José Cohen, quien desertó en 1994. "Es
una de sus típicas reacciones ante las crisis''.
Cohen, de 37 años, consideró que este suceso fue generado por
la ''maquinaria altamente eficaz'' del Ministerio del Interior (MININT), que ha
servido en múltiples ocasiones anteriores para operar los frecuentes
casos de incursiones en sedes diplomáticas.
''Lo que no acaba de asumir la comunidad internacional es que está
lidiando con un tipo despiadado y gansteril [Castro], que no tiene respeto por
nadie y que es capaz de las manipulaciones más inusitadas'', agregó
el ex oficial, graduado del Instituto Superior del MININT.
De acuerdo con su versión, los acontecimientos de la embajada se
producen en un momento muy particular de las relaciones bilaterales, luego que
el canciller mexicano Jorge Castañeda hiciera pronunciamientos en La
Habana y Miami que no resultan del agrado de Castro.
''Por lo menos ya Cuba logró que México se pronunciara a su
favor'', explicó. "Como la reacción de Castañeda fue
culpar al exilio, pues el desenlace puede ser negociado''.
Cohen calificó como ''muy sospechoso'' el hecho de que la televisión
cubana transmitiera el miércoles imágenes del reforzamiento de la
vigilancia policial en la embajada mexicana.
''Con una embajada rodeada de militares, ¿quién va a lanzarse
con autobús contra un cordón de seguridad'', se cuestionó.
Agregó que el desenlace pudiera sobrevenir cuando alguno de los
asaltantes de la embajada salga voluntariamente del lugar y aparezca ante la
televisión cubana diciendo que está arrepentido y culpando a la
emisora Radio Martí por haber difundido insistentemente las palabras de
Castañeda.
''La coartada es evidente'', apuntó Cohen.
Especialista en criptología, Cohen laboró en la XI Dirección
del MININT y en los departamentos M-VI y M-I de la Dirección de
Inteligencia. El gobierno de Estados Unidos le otorgó asilo político
y le concedió visas a su esposa e hijos.
Pero el régimen cubano ha impedido por siete años la
reunificación de la familia, a pesar de las numerosas gestiones y
denuncias realizadas por Cohen con el apoyo de personalidades y organismos
internacionales.
Busca enemistar a los opositores con Fox, dicen
Pablo Alfonso. El Nuevo Herald
Mientras que Cuba y México culpaban el jueves a grupos anticastristas
de Miami por el asalto a la embajada mexicana en La Habana, ocurrido la víspera,
dirigentes del exilio y analistas políticos sostienen que el incidente es
una provocación organizada por el régimen de Fidel Castro.
''Es una burda maniobra castrista para enturbiar las relaciones del gobierno
de México con la oposición dentro y fuera de Cuba'', afirmó
Jorge Mas Santos, presidente de la junta de directores de la Fundación
Nacional Cubano Americana (FNCA).
Mas Santos señaló la ''coincidencia del incidente'' con el
encuentro que sostuvo un día antes en Miami con exiliados cubanos el
canciller mexicano Jorge Castañeda.
''Castro quiere crearle una situación difícil a Castañeda
y enemistar al exilio cubano con el gobierno de [Vicente] Fox'', subrayó
Mas Santos. "No debemos caer en esa trampa de ajedrez político''.
Analistas consultados por El Nuevo Herald coinciden en señalar que el
incidente favorece a La Habana, en detrimento de sus opositores y apuntan que:
Obliga al gobierno de Fox a definir su posición frente a los
exiliados y opositores internos, a los cuales recibió en privado en La
Habana.
Crea una situación difícil para el canciller Castañeda,
que ya es blanco de las críticas de la izquierda mexicana por sus
relaciones con la oposición anticastrista y quien afirmó que México
terminaba sus relaciones con la revolución cubana para iniciarlas con la
República de Cuba.
Ofrece la oportunidad de atacar a Radio Martí y facilitar
argumentos a sus críticos en el Congreso de Estados Unidos.
Difunde una mala imagen del exilio anticastrista en círculos
políticos y periodistícos de México.
''No tengo dudas de que esto es una maniobra de Castro y una escalada de
confrontación contra Radio Martí y el canciller mexicano'', afirmó
Ernesto Betancourt, especialista en asuntos cubanos residente en Washington.
Para el representante en el exterior del Movimiento Cristiano Liberación,
Francisco de Armas, el incidente ''sigue el mismo patrón'', de lo
ocurrido en 1980 en la embajada de Perú y en la década de 1990 en
varias embajadas europeas, algunas de las cuales fueron ocupadas por agentes
encubiertos de la inteligencia cubana.
''Ocurre en un momento igualmente crítico para Castro en el orden
interno, agravado por problemas económicos, que pudiera desembocar en
nueva crisis migratoria'', aseguró.
Según Jaime Suchlicki, director del Instituto de Estudios Cubanos y
Cubanoamericanos de la Universidad de Miami, todavía ''es muy temprano'',
para llegar a conclusiones sobre los propósitos de Castro, en el caso de
que el incidente hubiera sido planificado por el régimen.
''Castro ya sabe que no puede esperar nada de la Casa Blanca, y entonces tal
vez quiera crear una crisis que desemboque en un problema migratorio para
hacerle al presidente Bush el mismo test que ha hecho con otras
administraciones'', afirmó Suchlicki.
Otros incidentes en embajadas
El ingreso violento de personas en la embajada de México en Cuba el
viernes por la noche es el quinto de ese tipo que se produce desde 1980, cuando
miles de personas se refugiaron en la legación peruana en La Habana.
Abril de 1980 -- Un grupo de seis personas entra por la fuerza en un
autobús en la embajada de Perú en La Habana y los diplomáticos
peruanos rehusan entregarlos a las autoridades. En la irrupción muere un
policia, por lo cual el gobierno cubano retira protección a la sede
diplomática. Entran entonces 10,000 personas a la legación y eso
lleva al éxodo de 128,000 personas desde el puerto de Mariel.
Julio-agosto 1990 -- Alrededor de 50 personas entran en las embajadas
de España, Checoslovaquia, Bélgica, Italia, Canadá y Suiza,
en un episodio denominado crisis de las embajadas. El gobierno no cede en su
posición y los aspirantes a refugiados tienen que regresar a sus casas.
9 de septiembre de 1993 -- Once personas entran en la embajada de México
y, tras negociaciones y por tratarse de México, Cuba hace una excepción
en su política migratoria y deja salir a los ocupantes de la sede por via
aérea.
Mayo de 1994 -- Unas 150 personas entran en las embajadas de Bélgica,
Alemania y en el consulado chileno. Las autoridades cubanas mantienen su política
de no negociar con los ocupantes y éstos retornan a sus hogares. Cuatro
meses después se produce la crisis de los balseros, como se denomina la
fuga de unas 26,000 personas hacia Estados Unidos desde las costas cubanas.
La actitud de México definirá la reacción de Castro
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
¿Cuál es la reacción de las fuerzas de seguridad cubanas
ante un hecho como el ocurrido en la embajada de México en La Habana? ¿Pudiera
estar ''penetrado'' el grupo que accedió a la sede? ¿Qué
probabilidad existe de un asalto armado en caso de que los ocupantes se nieguen
a abandonar el lugar?
El ex capitán Lázaro Betancourt, quien formó parte del
Comando de Misiones Especiales de la Dirección de Seguridad Personal
(DSP) y participó en operativos en varias embajadas europeas invadidas
por cubanos en 1990, aseguró ayer que Cuba tiene los pasos
''estrictamente calculados'' ante situaciones de este tipo.
''La postura que adopte el gobierno de México en las próximas
horas va a determinar el plan operativo'', explicó Betancourt, de 39 años,
quien desertó durante un viaje con Fidel Castro a República
Dominicana en abril de 1999. Su deserción fue la primera de un oficial
(en funciones) de la escolta personal del gobernante cubano.
De acuerdo con el ex oficial, ya están dados los primeros pasos con
el aislamiento de la zona y los preparativos de negociación. El tráfico
y el acceso a los alrededores de la embajada fue bloqueado desde las primeras
horas del jueves.
''En estos momentos se actualizan todos los planos de la embajada (vías
de acceso, entradas principales y secundarias, etc.) y se crean los grupos
especiales de asalto, apoyo y recepción para una posible acción'',
relató Betancourt, que integró por 16 años el Comando.
Añadió que previamente se aplican técnicas de asedio,
con la insistencia de que no se aceptará la salida del país bajo
ninguna condición, y en una fase extrema se cortan las comunicaciones así
como los suministros de alimento y agua.
Por otro lado, se establece un criterio de peligrosidad para los asaltantes,
insistiendo en que estos individuos podrían crear problemas graves dentro
de la sede diplomática.
''Cuba dejará saber que tiene un comando listo para sacar a los
ocupantes, sin riesgos para el personal diplomático, pero que esa decisión
depende del gobierno mexicano'', señaló. "Lo que debe quedar
claro es que esa fuerza va a actuar si se le permite''.
El puesto de mando operativo se integra de inmediato con la participación
de oficiales de las principales dependencias del Ministerio del Interior
(MININT) y se activan los planes de protección de la DSP, pues Castro
puede visitar con frecuencia la zona.
Como integrante del Comando, Betancourt participó en la Operación
Verano 90, que enfrentó las crisis desatadas entre julio y agosto de ese
año por el ingreso ilegal de cubanos en ocho sedes diplomáticas
europeas.
''Ocho de los integrantes del Comando penetraron en la embajada de España
y estuvieron un mes infiltrados allí con el propósito de crear desórdenes
internos'', recordó. "En la de Bélgica estábamos ya
listos para el asalto, pero las técnicas de asedio funcionaron''.
Para Carlos Cajaraville, ex capitán de inteligencia Carlos
Cajaraville, quien participó en los operativos secretos de la embajada
del Perú, en 1980, cualquier salida tendrá un costo político
negativo para el gobierno cubano.
''Las imágenes de Cuba que están ahora circulando por todo el
mundo son la de las fuerzas represivas con perros, y todo esto tiene un impacto
sobre el turismo en un momento económico muy comprometido'', opinó.
Cajaraville agregó que no creía que el incidente fuera creado
por los agentes de Castro, porque algunos de los hombres que entraron en la
embajada gritaron: "¡Abajo Fidel!''.
''Incluso eso es sagrado para la gente de la Seguridad de Estado'', aseveró.
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