"Beneficios"
de una central de teléfonos digital
Luis Alberto Rivera, APLO
SANTIAGO DE CUBA, mayo - La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A.
(ETECSA) ofrece múltiples opciones para beneficiar a sus usuarios.
Llamadas en espera, transferencia de llamadas, conferencia tripartita, candado
electrónico, despertador automático, línea directa, número
fácil y más, que evidencian las ventajas de un sistema tecnológico
sofisticado.
Sin embargo, contrariamente al eslogan de que ETECSA representa la mejor
atención al cliente, la realidad es que priman los cortes de llamadas y
los "números restringidos" de las manipuladas telefonistas del
servicio internacional de dicha empresa.
Cuando alguien se queja a ETECSA de estos problemas, generalmente se
justifican con el consabido "problemas en la línea".
No obstante, llama la atención que la mayoría de los cortes de
llamadas internacionales ocurre en el justo momento en que se tratan temas no
gratos para el gobierno cubano.
"Cuando se habla de la escasez de medicamentos o de alimentos, de algún
abuso policial u otros asuntos relacionados con injusticias o deficiencias
estatales, ahí mismo se cae la llamada", expresó una
residente de la ciudad de Santiago de Cuba, que no reveló su nombre
porque teme que más nunca podrá hablar con sus familiares en
Estados Unidos.
Este detalle es muy interesante, pues evidencia que durante la comunicación
internacional las telefonistas pueden escuchar lo que hablan a cada lado de la línea.
La privacidad en Cuba es un derecho subordinado a los intereses del Estado
socialista. La propia Constitución expresa claramente que la
correspondencia puede ser violada por cuestiones de Seguridad del Estado, y éstas
pueden ser cualquier asunto o actuación que no cuadre con lo que dicen u
orientan los dirigentes del Partido Comunista.
Un ejemplo es el caso de la santiaguera Marcia Pérez Castillo, que
fundó en su casa una biblioteca independiente para que todo ciudadano que
lo desee lea los textos que ella expone en unos pocos anaqueles.
Resulta ser que funcionarios de la ETECSA -por cierto, empresa cubano
italiana- han amenazado a la señora Pérez Castillo con retirarle
el servicio telefónico, y no le permiten usar las beneficiosas opciones
de la central digitalizada de esta ciudad.
¿Por qué? Pues porque la señora Pérez Castillo no
es adicta a la política del gobierno cubano y así lo expresa pública
y telefónicamente.
Un refrán popular dice "siempre hay un ojo que te ve". Pero
con ETECSA todo apunta a que siempre hay un oído atento a lo que se
habla, principalmente si se trata del servicio de llamadas internacionales.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
Internet.
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