¿Quién
dijo que se fueron?
José Antonio Fornaris, Cuba Verdad
LA HABANA, julio - El amarillo del azufre que contiene el petróleo de
Cuba no ha podido sustituir la "luz" y muchas zonas de esta isla
sufren, nuevamente, los cortes de electricidad y por consiguiente la "oscuridad".
Este verano, barriadas enteras de Ciudad de La Habana ya han estado siete u
ocho horas "en apagón". De la ciudad de Santa Clara -que nada
clara ha estado- llegan voces que expresan que allí, por estos días,
los cortes de electricidad han llegado hasta a trece horas continuas.
Informaciones no confirmadas especifican que los apagones se deben a roturas
en las plantas generadoras de electricidad de Matanzas y Cienfuegos, mientras
que algunas personas comentan que el aumento de un peso en la tasa interna de
cambio del dólar se debe a la imperiosa necesidad de recolectar un poco
de dólares para comprar el "oro negro", ya que Cuba tiene que
pagar con dinero contante y sonante porque nadie le quiere fiar, o sea, dar crédito.
Otros ciudadanos, con un sentido filosófico de la existencia, dicen
que los apagones están acordes con la situación reinante, en armonía,
"pues en Cuba hace muchos años que estamos en la oscuridad".
Por suerte, hasta el momento, oficialmente no se ha dicho que estos apagones
se deben al recrudecimiento del bloqueo -embargo- o a las actividades de la
Fundación Nacional Cubano Americana ni a la agresividad del gobierno de
Bush. Tampoco se ha dicho que "la batalla de ideas", salvadora de la
humanidad y que lógicamente debe tener un gran resplandor, pueda
sustituir a la energía eléctrica.
De todas formas, sí hubo ablandamiento artillero porque la prensa
gubernamental tocó profusamente el tema de los cortes del servicio de
electricidad en Santo Domingo, Brasil y California, Estados Unidos.
Pero, sea lo que sea, lo cierto es que los apagones no se habían ido.
Ellos no toman ni construyen, como han hecho muchos cubanos, una embarcación
y se largan ilegalmente (desde el punto de vista gubernamental) para La Florida.
Nada de eso. Los apagones son elemento consustancial del régimen político
imperante en esta isla que, aunque tiene mucho sol, necesita urgentemente de la
eterna luz de la libertad.
En este contexto, y en diferentes lugares públicos, aparecen
pasquines a todo color con las imágenes de los cinco "héroes"
presos en Miami por espiar para el régimen de Fidel Castro -y por algunas
otras actividades ilegales- que exhortan a una marcha combatiente por la
liberación de esos "patriotas".
Desde que comenzó la... disculpen, un párrafo al margen: Doce
del mediodía, el sol está en su cenit, 24 de julio de 2001. La
radio dejó de funcionar como por arte de magia, el ventilador se detuvo.
Comenzó el apagón de hoy.
Retomo la idea. Desde que comenzó la enorme campaña del
gobierno en favor de que los cinco "patriotas" sean excarcelados me
llamó la atención sus rostros complacidos y sus apariencias
gozosas viviendo, sufriendo, en las entrañas del monstruo, del imperio
yanqui, y, ¡claro, ahora me doy cuenta!, es que en Miami no hay apagones.
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