La ciudad más
cara del mundo
Lucas Garve, CPI
LA HABANA, julio - Tokío es la ciudad más cara del mundo, según
The Economist Unit Intelligence. Pero, hay quienes sostienen en La Habana un
criterio diferente.
Un almuerzo en El Floridita para cuatro comensales muy bien puede costar
trescientos dólares. ¡Claro, El Floridita es un establecimiento
legendario!, podrá usted pensar. Mas sin dudas la pizza Cappriciosa (una
pizza con langosta, anchoas, aceitunas, atún, chorizo y jamón)
cuesta la bicoca de noventa pesos en los Chinitos, un restorán
especializado en pastas sito en la calle Dragones entre San Nicolás y
Manrique, en el Barrio Chino habanero. Allí un almuerzo simple (una pizza
y dos cervezas) puede seguramente costarle 130 pesos. ¡Una pizza y dos
cervezas, 130 pesos? Pues sí. Multiplique 6.19 dólares por 21
pesos (cambio vigente) y le dará la cuenta.
En La Habana, un pernil de puerco le puede costar 400 ó 500 pesos.
Una frutabomba de tamaño regular entre 12 y 15 pesos. Ayer mismo, alguien
me habló de los primeros aguacates del año que se venden al "módico"
precio de 10 pesos cada uno, ¡y donde los encuentres!
Una botella de ron B alcanza los 160 pesos. Un par de zapatos de suela de
goma no menos de 250 pesos. Para ir de un lado a otro de la ciudad -muy extensa
y con anchas avenidas- es necesario optar por un auto, pues en los autobuses
urbanos la pérdida de tiempo es incomparable y cada viaje en taxi cuesta
10 pesos por persona. Aunque, por razones de conveniencia, el chofer cubre un
trayecto del que no se desvía, lo que ocasiona la obligación de
montar en otro carro, ¡allá van otros 10 pesos! Es de esta manera
que usted puede gastar 100 ó 200 pesos en sólo varias horas.
Además, necesita comprar varios artículos para el hogar, ¡prepárese!
Un frasco de detergente líquido para fregar, 25 pesos. Una escoba plástica,
23 ó 25. Un cubo plástico de cinco litros, 40 pesos. Vea usted
mismo las cuentas aquí no son pequeñas, y tenga en cuenta que el
salario promedio es de 249 pesos al mes, según informaciones oficiales.
Se dará cuenta, ¡de cuánto vale la vida en La Habana!
Evidentemente, toda esta situación trae una serie de consecuencias
perjudiciales para la salud económica del consumidor promedio. Y no pocas
son las quejas que puede escuchar, si tropieza con cualquiera en la calle.
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