Aprobación
a los Reyes
Fara Armenteros, UPECI
LA HABANA, enero - En la Habana Vieja Los Reyes Magos ofrecieron a los niños
regalos y una fiesta organizada por la Embajada de España, para recreo de
la fantasía infantil. Como en la leyenda bíblica, la visita de los
reyes provocó la reacción de las autoridades, que en esta ocasión
desataron una tremenda campaña en los medios de prensa, todos propiedad
del Partido Comunista, para desacreditar el gesto de los funcionarios españoles.
Sin embargo, la opinión de padres cuyos hijos participaron en la
actividad difiere de la versión oficial de los hechos. La UPECI recogió
algunas impresiones de estas personas, que pidieron el anonimato porque al decir
de una de ellas, una madre en este caso, "estábamos prácticamente
presos y no lo sabíamos".
Esta madre agregó: "Pasamos una tarde muy agradable. Nadie nos
atropelló. Mis hijas y yo no nos sentimos en ningún momento
humilladas, y el resto de los que participaron creo que tampoco".
Otra mujer, una joven madre, aseguró que ella asistió al acto
junto a sus dos hijas de 2 y 10 años respectivamente. Ella manifiesta: "Preocupación
sentí hoy, cuando mi hija llegó de la escuela perturbada porque
participó en la actividad de Los Reyes Magos que era una fiesta
contrarrevolucionaria, según le informaron en el matutino escolar, y tuve
que aclararle esa imagen".
Otras declaraciones al respecto fueron las siguientes:
"Susto pasé hace una semana cuando paseaba con mis hijas y mi
esposo y me caí en un hueco que hay en la acera del Malecón, me
quedé suspendida en el vacío, apoyada solamente por las axilas".
"Miedo tengo todos los días al tener que viajar en uno de esos
camellos (camiones de carga usados como transporte público) para ir al
trabajo, regresar a la casa y transitar por calles oscuras".
"Humillada me siento cada vez que me paro ante una tienda dolarizada y
no puedo comprarle a mis hijas un juguete, un dulce o un vestido bonito, no
obstante que su padre y yo trabajamos".
Raúl, un negro alto y canoso, expresó: "Este incidente de
Los Reyes Magos yo lo relaciono con el hecho de que desde el momento en que llegó
al poder la Revolución, esta trató de apartarnos de las costumbres
religiosas y de las tradiciones imponiéndonos sus criterios".
Y el hombre concluyó enfáticamente: "Yo vivo en el Cerro,
es una pena que Los Reyes Magos de la Embajada de España solamente
visitaran a los niños de la Habana Vieja. En verdad es una pena. Aunque
la verdadera pena es vivir bajo un régimen totalitario".
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