Transporte público
en La Habana: una crisis que no cesa
Oswaldo de Céspedes, CPI
LA HABANA, enero - La crisis del transporte público en Cuba, que se
agudizó luego del desplome del campo socialista, no ha tenido solución
en estos últimos 10 años a pesar de la dolarización de la
economía implementada por el gobierno de la Isla.
Al concluir el 2000 el gobierno comunista no cuenta con los fondos
necesarios para garantizar esta actividad vital del país. A pesar de que
dirigentes de ese grupo político aseguran que el producto interno bruto
creció en comparación con años anteriores, la ciudadanía
no cuenta con los medios para transportarse con seguridad, confort y
puntualidad.
El parque de equipos procedentes de la Unión Soviética,
Checoslovaquia, Hungría y otros países, quedaron como piezas
museables debido a la falta de partes de repuesto. El gobierno de Cuba tuvo que
recurrir a la compra de máquinas fabricadas en países
capitalistas, pero en cantidades limitadas pues no destina dinero suficiente a
tal propósito.
Los medios alternativos usados para tratar de aliviar la agudización
de la crisis agrupa desde carretones tirados por caballos hasta la transformación
de camiones de carga en vehículos para pasajeros. Estos últimos se
conocen por "camellos". Los camellos son capaces de trasladar 300 o más
personas, pero de manera incómoda y antisaludable.
Otra opción es la bicicleta que, según opinan algunos, evita
el estrés ocasionado por las filas de espera de los camellos, pero
multiplica el hambre debido al fuerte ejercicio físico que implica
pedalear de una zona a otra de esta capital.
A diez años del comienzo del llamado "período especial",
que según otros comenzó en 1959, y a cinco del llamado despegue
económico que vienen anunciado los voceros gubernamentales y que el
pueblo no avizora, el cubano de a pie depende para transportarse de la tracción
animal, de los antihumanos camellos -donde prolifera el carterismo y el acoso
sexual- y de las bicicletas. En tanto, se puede ver cómo las nuevas
clases de privilegiados disfrutan de los "beneficios del socialismo".
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
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