Sobrevivir a
cualquier costo es el lema de muchos cubanos
Víctor Rolando Arroyo, UPECI
PINAR DEL RIO, febrero - Existe un aumento de los males sociales,
principalmente en la adolescencia y la juventud, segmentos donde parece que la
labor del sistema de educación establecido por el Partido Comunista de
Cuba y de su sociedad organizada no ha sido positiva.
Cada día aumentan vicios como la prostitución, el
homosexualismo, el alcoholismo y junto con ellos se resquebrajan los más
elementales valores del hombre, tales como la responsabilidad, la honradez y la
laboriosidad, entre otros.
Unos culpan de esta situación a las crisis económica, otros a
la desatención de los hijos por parte de sus padres e incluso están
los que creen que la escuela no efectúa responsablemente su labor o que
la sociedad no es el mejor ejemplo.
Lo cierto es que cada vez con mayor frecuencia se ve cómo los
jineteros y jineteras asedian a los turistas ofreciéndoles sus cuerpos jóvenes
y hermosos a cambio de unos dólares.
Por ejemplo, en Pinar del Río se pueden constatar esas escenas en
derredor de la fábrica de tabacos, del hotel Pinar del Río y en el
kilómetro 13 de la carretera de Viñales, lugares considerados como
"puntos para jinetear".
La prostitución es el vicio que más se hace notar y que crece
día por día.
¿Por qué?
Porque para los jóvenes el estudio o el trabajo honesto ha perdido
todo su mérito, en país donde una noche de servicios sexuales
puede dejar ganancias muy superiores a las del salario anual de un profesional.
Ahora, se suele oír a muchos padres como elogian la manera "emprendedora"
en que sus hijos se "buscan los pesos". Ya poco importan en muchos
sectores de la sociedad cubana el honor, la decencia o cualquier cuestión
de índole moral. El lema es sobrevivir a cualquier costo.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza
la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como
fuente.
|