Publicado el 4 de diciembre de 2001 en
El Nuevo Herald
El exilio cubano apoya la reconciliación
Aunque la mayoría cree que política de enfrentamiento ha
sido un fracaso, apoyan la continuación del embargo
Rui Ferreira. El Nuevo Herald
La mayoría de los exiliados cubanos cree en la reconciliación
nacional, reveló una encuesta pagada por el Grupo para el Estudio de Cuba
(GEC), entidad que aglutina a empresarios y activistas cubanoamericanos a la que
tuvo acceso El Nuevo Herald ayer.
Los encuestados también opinaron que la política de
enfrentamiento entre ellos, los sucesivos gobiernos de Estados Unidos y el régimen
de Cuba imperante durante cuatro décadas ha sido un fracaso; apoyaron el
trabajo de la disidencia interna y abogaron por los viajes a la isla, pero
sostuvieron que el embargo económico debe continuar.
Según el estudio hecho a una muestra de 837 cubanoamericanos y
cubanos, todos residentes del Condado de Miami Dade:
El 53 por ciento dijo creer en la política de "perdón y
reconciliación'' propugnada por la Iglesia Católica, y que los
viajes de los exiliados a la isla eran un factor importante en una transición
democrática.
El 55 por ciento opinó que la política de enfrentamiento con
Cuba ha sido un fracaso, en tanto que el 31 por ciento expresó que ha
sido la mejor estrategia. Aun así, el 53 por ciento declaró que el
embargo económico debe continuar, mientras que el 32 sostuvo lo
contrario.
En cuanto al liderazgo local, el 78 por ciento coincidió en que el
exilio precisa un líder. Sin embargo, la mayoría no pudo
identificar siquiera uno cuando se le pidió que lo hiciera.
El presidente de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Jorge
Más Santos, y el representante federal republicano por el sur de la
Florida Lincoln Díaz-Balart aparecen al frente de la lista, con el 10 por
ciento de las preferencias.
Les siguen el locutor Armando Pérez Roura (dos por ciento) y el
alcalde de Miami-Dade, Alex Penelas (uno por ciento), al igual que el activista
del Movimiento Democracia Ramón Saúl Sánchez. El 73 por
ciento no respondió a la pregunta.
En términos meramente políticos, según el sondeo hecho
por la firma Bendixen & Associates con un margen de error de más/menos
3 puntos porcentuales, el segmento de "línea dura'' de la comunidad
exiliada es menor de lo esperado.
"Su poder político parece funcionar más en función
de la cobertura que recibe por parte de la prensa que controla, que por la
cantidad de gente que representa'', señala en las conclusiones Sergio
Bendixen, quien dirigió la encuesta.
Así, el 49 por ciento se definió como centrista, el 28 abogó
por un cambio en la política hacia la isla, y el 23 por ciento se
autodefinió de "línea dura''. La mayoría en éste
último segmento arribó a Estados Unidos en la década de los
años 60, tiene más de 50 años de edad y el 74 por ciento
posee ciudadanía estadounidense, concluyó la encuesta.
Los que abogaron por un cambio en la política hacia la isla llegaron
en las últimas dos décadas, tienen entre 18 y 49 años, y
apenas la mitad de ellos se ha naturalizado. Los puntos de vista de los
centristas fluctúan según los temas, y no pudieron ser
clasificados por edad, cuándo llegaron a Estados Unidos ni cuál es
su situación socioeconómica.
Sobre el panorama político cubano, el 58 por ciento de los
encuestados opinó que los disidentes internos son "patriotas''; el
19 por ciento afirmó que no pasan de "fidelistas enmascarados'', y
el 23 por ciento no sabe o no contestó.
Concluye sin acuerdo ronda entre EU y Cuba
Agence France Presse. La Habana
La 17 ronda de conversaciones migratorias entre Cuba y Estados Unidos
finalizó ayer en La Habana con propuestas y críticas de las dos
partes, pero sin avances respecto a las pláticas de hace seis meses,
admitieron los participantes.
"Desde el punto de vista de la dinámica de las conversaciones no
puedo decir que hemos avanzado un milímetro desde las anteriores hace
seis meses'', dijo el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón,
quien encabezó la delegación de su país.
"Espero que tengamos más progresos en la próxima ronda'',
dijo por su parte el coordinador de Asuntos Cubanos en el Departamento de Estado
norteamericano, James Carragher, quien presidió la comitiva de 17
funcionarios de su país.
En conferencias de prensa por separado, ambas delegaciones coincidieron no
obstante en que las conversaciones fueron "muy serias'', según
Carragher y "en un ambiente serio, y respetuoso'', según Alarcón,
quien dijo además que hubo "una discusión franca y bastante
amplia''.
La ronda, que según recalcaron los estadounidenses tuvo un carácter
"técnico'', revisó los acuerdos migratorios entre ambos países
de septiembre de 1994 y mayo de 1995, que regula la emigración legal y
ordenada desde Cuba a Estados Unidos.
En esos acuerdos, Estados Unidos se comprometió a otorgar 20,000
visas anuales a Cuba y repatriar a los ilegales interceptados en alta mar o en
la base naval de Guantánamo.
Cuba aceptó disuadir por métodos persuasivos las salidas
ilegales y reinsertar socialmente a los devueltos sin consecuencias legales.
Los exiliados celebrarán el centenario de la República
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
Activistas cívicos y promotores culturales del exilio emprenderán
las celebraciones por el centenario de la República de Cuba (1902-2002)
como "una convocatoria abierta al pueblo cubano'' de la isla y la diáspora.
Una veintena de organizaciones --radicadas mayormente en Miami-- se han
integrado en un llamado Comité del Centenario Cubano que promoverá
un calendario de exhibiciones de arte, conciertos musicales, presentaciones escénicas,
conferencias, concursos y excursiones a diversos lugares históricos.
"Este calendario es simplemente un marco abierto para que los cubanos
vayan llenándolo con sus iniciativas en cualquier parte del mundo'',
manifestó ayer la doctora Rosa Leonor Whitmarsch, coordinadora del Comité.
Whitmarsch dijo que su entidad no pretende exclusividad alguna en la
organización de festividades por la efeméride, sino alentar a que
grupos comunitarios y artísticos, instituciones culturales y centros
educacionales reafirmen y exalten los valores tradicionales cubanos durante el
próximo año.
Entre las organizaciones que integran el Comité están la
Asociación Nacional de Educadores Cubanoamericanos (NACAE), Círculo
de Cultura Panamericano, Herencia Cultural Cubana, Fundación Félix
Varela, Editorial Cubana, Círculo Cubano-Hebreo, FACE, Coalición
de Mujeres Cubanoamericanas, Instituto San Carlos de Cayo Hueso, Instituto
Jacques Maritain, Municipios de Cuba en el Exilio, Pen Club de Escritores
Cubanos, y las universidades de Miami y St. Thomas.
También figuran la Casa Cuba de Houston (Texas), Patronato José
Martí (Los Angeles), Association du Centenaire de la Republique Cubaine
(ACRC), con sede en París, y Fundación Hispano-Cubana, radicada en
Madrid.
Las actividades del Comité comenzarán el 3 de enero con un
acto ecuménico y noche cubana en la Ermita de la Caridad, en Coconut
Grove, donde comparecerán prominentes líderes religiosos de la
comunidad.
El 5 de enero habrá una velada artística en el Instituto San
Carlos de Cayo Hueso, que a su vez celebra el décimo aniversario de su
reapertura.
Según informó el abogado Rafael Peñalver, presidente de
esa institución, ese día se cerrará la Calle Duval, en el
centro de Cayo Hueso, para facilitar una gran festividad popular, que incluirá
un concierto sinfónico de música cubana y la inauguración
de tres exposiciones con documentos históricos.
Las muestras, que permanecerán abiertas allí hasta el 20 de
Mayo --fecha de instauración de la República-- recogerán
documentos sobre la vida del prócer José Martí (1853-1895),
fotografías cubanas y retratos al óleo de los presidentes
republicanos.
"Este es un momento que debe servirnos para una profunda reflexión
sobre lo que representa ser cubanos, y cómo podemos encauzar nuestras
fuerzas para reconstruir al país durante los próximos cien años'',
manifestó Peñalver a El Nuevo Herald.
En París, la ACRC promoverá el lanzamiento de libros de
autores franceses sobre Cuba, en la Casa de América Latina, el 15 de
enero.
Para más información llamar a los teléfonos (305)
633-5277 y (305) 579-9000.
Hay brotes de dengue en La Habana, dice Castro
Efe. La Habana
El gobernante cubano, Fidel Castro, dijo el lunes que se han detectado
brotes de dengue en La Habana, pero que su país cuenta con toda "la
experiencia y los recursos suficientes'' para enfrentar la epidemia, de cuya
erradicación está "convencido''.
Castro presidió el acto por el Día de la Medicina
Latinoamericana, fecha instituida en 1933 en honor al científico cubano
Carlos J. Finlay, y afirmó que su país "tiene ganada la
batalla contra el sida''.
"En la capital se han detectado algunos focos de dengue, y lo vienen
combatiendo en un momento en que disponemos de organización, medios y una
experiencia tremenda'', explicó Castro.
Agregó que el mosquito Aedes Aegypty, trasmisor de la enfermedad, "a
veces se vuelve resistente y adquiere nuevas habilidades'', y señaló
sin embargo que "nunca en esta capital hubo un índice más
bajo'' de este insecto, "que el que tenemos actualmente''.
Añadió que se están utilizando "insecticidas y
equipamientos más eficientes'', pero consideró que para enfrentar
la epidemia, cuya magnitud no explicó, se requiere "de una
disciplina tremenda y la colaboración de todos''.
Asimismo, llamó al perfeccionamiento de todo el personal involucrado
en esta campaña, "pues tenemos todos los medios, equipos, recursos,
toda la experiencia, y no hace falta más que la toma de conciencia y las
medidas pertinente para ganar esta batalla''.
Castro recordó que en el verano de 1981 "más de 350,000
se infectaron en una epidemia introducida aquí en nuestro país con
el virus dos, que al combinarse con los anticuerpos que dejaba el virus uno, da
lugar al dengue hemorrágico''.
"No es esa la situación que tenemos ahora'', afirmó
Castro, que exhortó a todos los que están en esa tarea "a que
tomen conciencia y liquidemos el problema. Tenemos la convicción de que
lo alcanzaremos''.
Dijo que el número de visitantes que la isla recibe de América
Latina "es cada vez mayor'', y "basta un caso o un solo mosquito''
para que se trasmita la enfermedad.
"Nuestra tarea es reducir a cero si es posible el mosquito. Hay
experiencia, fuerza y recursos suficientes, porque el riesgo es muy grande'',
afirmó.
Por otra parte, Castro aseguró que en su país "la batalla
contra el sida'', palabra que calificó de "horrorosa'', está
ganada.
Afirmó que Cuba "es uno de los países con más
bajos índices de la enfermedad'', y que este año contará "con
nuevos medicamentos para atender no sólo a los enfermos, sino a los que
están infectados, que son entre 2,800 o 3,000''.
"Aquí no se habla de millones, ni de ciento de miles ni de
decenas de miles, sino de 3,000, y no dormimos cuando pensamos que tenemos esta
cifra, y en la mano los recursos y medicamentos para impedir que nazca un solo
niño de las madres portadoras del virus y para prolongar la vida de los
que se han enfermado'', recalcó.
Agregó que se trata igualmente "de reducir al mínimo el índice
del virus''.
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