29 de noviembre de 2001.
Reporteros sin Fronteras.
En vísperas de la visita de una "troïka" de la Unión
europea (UE) a Cuba, presidida por el Secretario general de Asuntos exteriores
belga, el señor Jan De Bock, Reporteros sin fronteras (RSF) se dirigió
a este último para llamar su atención sobre la falta de evolución
en la situación de la libertad de la prensa en la isla. Según la
organización, se han registrado, desde el 1 de enero de 2001, casi un
centenar de actos de acoso contra agencias de prensa independientes, no
reconocidas por la autoridades. Está misión de la "troïka"
europea tiene como objetivo "volver a iniciar el diálogo político"
con Cuba, que está interrumpido desde que el Consejo de la UE adoptó,
el 2 de diciembre de 1996, una posición común que supedita "una
plena cooperación con Cuba dependerá de las mejoras en el respeto
de los derechos humanos y las libertades políticas". Esta posición
común podría estar en juego al final de la visita. Por otra parte,
Cuba desearía adherirse a los Acuerdos de Cotonu, mediante los cuales,
los Quince ayudan a los países de ACP (Africa, Caribes y Pacífico).
"Habida cuenta de la falta de evolución en materia de respeto a
la libertad de prensa en Cuba, RSF le pide (
) que se mantenga la posición
común adoptada el 2 de diciembre por el consejo de la UE", confió
Robert Menard, secretario general de la organización. "En nombre de
esta misma posición común, le pedimos que se condicione la
profundización en las relaciones entre Cuba y la UE, a la extinción
del monopolio estatal sobre la información, que consistiría en
reconocer la existencia legal de las agencias de prensa independientes. Le
rogamos que intervenga en favor de la puesta en libertad de Bernardo Arévalo
Padrón."
En Cuba, donde sólo está autorizada la prensa oficial, un
centenar de periodistas independientes, agrupados en una veintena de agencias de
prensa no reconocidas por el Estado, son objeto de un acoso constante. Como
tienen prohibido publicar sus artículos en el país, los envían
por fax o por telefono a miembros de la comunidad cubana en el exilio, que les
difunde después en sitios Internet.
Según informaciones recogidas por RSF, el sindicalista José
Orlando González Bridón fue puesto en libertad condicional el 22
de noviembre de 2001, tres semanas antes de finalizar su condena. Había
sido condenado en apelación a un año de cárcel, el 21 de
agosto de 2001, por un artículo publicado en Internet en el que criticaba
a la policía. Aunque el número de periodistas encarcelados en Cuba
ha disminuído en los últimos años, se asiste ahora a un
recrudecimiento de los actos de acoso con el fin de conservar el monopolio
estatal sobre la información. Desde el 1 de enero, RSF ha censado cerca
de un centenar de actos de presión o de intimidación (amenazas,
agresiones, convocaciones por la policía, vigencia telefónica,
etc.). Por otra parte, veinticuatro periodistas fueron citados por la policía
este año. Desde 1995, cerca de cincuenta periodistas independientes
tuvieron que exiliarse para escapar a las presiones.
Cuba es también el único país de América Latina
donde se encarcela a periodistas. Bernardo Arévalo Padrón,
fundador de la agencia independiente Línea Sur Press, fue condenado a
seis años de cárcel en noviembre de 1997 por "desacato"
al presidente Fidel Castro y al vicepresidente Carlos Lage. Desde enero de 2001,
está detenido en el campo de trabajos forzados de El Diamante, en la
provincia de Cienfuegos. A pesar que padece dolores lumbares y una insuficiencia
cardíaca, se le niega consulta médica y se le han confiscado los
medicamentos. Últimamente, las autoridades rechazaron su petición
de liberación condicional por tercera vez, mientras que teóricamente
podía disfrutar de ella desde octubre de 2000, por haber cumplido la
mitad de la condena.
El presidente Fidel Castro está considerado por RSF como une de los
treinta y nueve predadores más peligrosos del mundo para la libertad de
expresión. |