Energía
renovable para escuelas rurales
Reinaldo Cosano Alén
LA HABANA, agosto - Cada asunto, cada situación, cada problema en
Cuba es motivo de alarde político, de inauguraciones y de "vencer
políticas imperiales".
Con el acto efectuado en el recóndito paraje de Jagua Vieja, en el
municipio La Palma, provincia de Pinar del Río, días atrás
se dio culminación al programa nacional de electrificación de
escuelas rurales con energía renovable (solar). Se afirmó que
1,944 escuelas fueron dotadas de paneles solares.
Según reveló el orador central del acto y gobernante cubano
Fidel Castro: "La idea del programa surgió cuando estábamos
en plena batalla por el regreso de Elián (González Brotons)",
con lo que no cabe dudas que además del altruismo que significa en sí
mismo que los niños campesinos tengan acceso a medios audiovisuales
modernos de aprendizaje: televisión, video y computación, es fácil
advertir la intención de adoctrinamiento político en las nuevas
generaciones. Al decir de Castro en el discurso de ese día, "con
ideas se pueden vencer políticas imperiales".
El otro aspecto cardinal es la elemental falta de cortesía al no ser
reconocido públicamente que el plausible gesto de acercar a nuestros
guajiritos a los adelantos tecnológicos fue posible, en buena medida,
gracias al apoyo dado a Cuba en sus proyectos de mayor explotación de
energías renovables por organizaciones extranjeras sin fines de lucro
como la Asociación Europea de Energía Solar (EUROSOLAR),
constituida en 1988, que ha ayudado a nuestro país desde que terminó
el flujo de petróleo soviético a bajo precio.
EUROSOLAR, además de la producción de energía eléctrica
del sol, se ha ocupado de la instalación de más de 400 nuevas
cocinas eficientes alimentadas por biogás obtenido a partir de desechos
orgánicos de la agricultura, 6 molinos de viento para extracción
del agua subterránea potable, y 15 bombas de agua, manuales, fabricadas
en Cuba, todo con financiamiento de la República Federal Alemana y
Luxemburgo.
Sin desconocer -que no es nuestra intención- los recursos propios del
país invertidos en la utilización de fuentes energéticas
renovables -que en mi opinión marcha de forma demasiado lenta- es justo
reconocer también la cooperación extranjera de EUROSOLAR y de
cualquier otro organismo internacional en lo que respecta a mejorar las penosas
condiciones de vida de los cubanos, porque en definitiva los pueblos siempre
trascienden a sus malos gobiernos.
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