El buen mango no forma parte de nuestra mesa
Tania Díaz Castro, Grupo Decoro
LA HABANA, mayo - Los mejores mangos cubanos, que provienen del municipio trinitario de la provincia Sancti Spíritus, podrán disfrutarse exclusivamente en países como España, Inglaterra, Francia, Canadá. Alemania e Italia. Se trata de los mejores ejemplares
controlados por una compañía canadiense, la Sherit Green, que sólo compra mangos de Trinidad. Se calcula que en esta cosecha, de abril a agosto, podrán recogerse 38 mil quintales de esta fruta, de los cuales sólo 5 mil -una cantidad insignificante- se dispondrán
para el mercado agropecuario, cuyos precios no están al acceso del cubano de a pie, y ninguna cantidad para los establecimientos de venta racionada.
Según fuentes confiables de campesinos independientes, este exquisito manjar tropical, el mejor de Cuba, estará ausente de la mesa del cubano que no cuente con buenos pesos para comprarlo cuando aparezca de improviso en el mercado privado.
Ocurrió igual en el siglo XVIII cuando Don Felipe Alwood trajo la semilla de mango a la Isla y colgaban éstos de un árbol exclusivo en la quinta de la Segunda Condesa de Jibacoa. Sólo cuando su jardinero extrajo clandestinamente una semilla y la sembró, pudo
vender más tarde a sus amigos pobres dos ejemplares por onza. Sólo así comenzó el mango a formar parte de la dieta del pueblo cubano.
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