Los campeones de la "Coca Cola"
María Elena Rodríguez, Cuba-Verdad
LA HABANA, mayo - El equipo "rojo" de béisbol categoría 13 -14 años de edad- de la Coca Cola, como se le conoce tradicionalmente, se coronó campeón en una "copa internacional Cuba-México", no auspiciada a niveles gubernamentales, que
se celebró entre el 17 y el 20 de abril en el estadio Rafael Conte.
El segundo lugar fue para el "Cuba azul", de Villa Marista -terreno anexo a la edificación donde actualmente se encuentra el cuartel general de la policía política-, y el tercero para los "Indios", de Tijuana, Baja California, México.
Los jugadores premiados con unos bellos trofeos traídos de Tijuana fueron los mexicanitos Pablo Reyes, líder bateador, y el lanzador Gabriel Hernández. El líder en jonrones fue Tesiel Torres, y el jugador más valioso, Carlos Alvarez, ambos pertenecientes al
equipo campeón.
El equipo de la "Coca Cola", integrado por trece jugadores, uno de los cuales resultó un invitado debido a que sólo cuenta 12 años, demostró el excelente rendimiento que lo ha caracterizado. En ese estadio se han formado y entrenado jugadores y entrenadores
estrellas. Actualmente, en este terreno se prepara, desde los siete años, el revelo beisbolero de Cuba.
Esta copa amistosa estaba prevista para jugarse en el estadio de la "Coca Cola" -llamado oficialmente Alfredo Sosa- en el municipio Cerro. Esta instalación muestra un gran deterioro desde hace años, y coincidiendo con el torneo se almacenaron allí los materiales de
construcción para su reparación, debido a lo cual los juegos se celebraron en el estadio Rafael Conte, de Diez de Octubre.
El tope amistoso consistió de siete juegos, muy reñidos, lo que provocó gran expectación y entusiasmo en el público presente, compuesto fundamentalmente por alumnos de quinto y sexto grado de la escuela primaria "Manuel Saiz", ubicada en las cercanías,
la cual llevó una banda y carteles, en los que se podía leer "México, hasta pronto", "Cuba campeón", y otros.
Mientras los niños cubanos en el terreno se maravillaban con los implementos deportivos de los mexicanitos, en las gradas uno de los padres cubanos expresaba: "Estamos invitados a México, pero ese viaje es muy difícil que el gobierno lo permita, y ellos sí que se
lo merecen". Otro de los padres dijo: "Aunque viajen solitos -los mexicanos viajaron con sus familiares- se lo merecen; han jugado como hombres, como profesionales, y eso sería un estímulo, unas vacaciones".
Luego de la premiación, el equipo "Indios" invitó a todos los jugadores cubanos a la discoteca El Túnel -del área dólar- para celebrar y realizar un intercambio de regalos, que hizo agonizar a los padres de los peloteritos cubanos, dada su situación
económica.
Entretanto, un cubanito valoró su regalo como inferior en relación con los hechos por los mexicanos, por lo cual, en una casa de La Habana aún duerme y espera por el mexicano Gabriel Hernández, líder de los lanzadores, una pelota firmada.
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