MIAMI, Estados Unidos.- Ramiro Valdés, vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba, dijo que el gobierno de la Isla debía aplicar medidas más rigurosas ante el robo “para asegurar una adecuada implementación de la política de la vivienda en Cuba”, de acuerdo a unas declaraciones que publicó el medio oficialista Cubadebate.
“Es inadmisible que los recursos no lleguen al pueblo, y por eso se debe ordenar bien el proceso, analizar los problemas existentes y tomar medidas judiciales, políticas y administrativas, cada vez más rigurosas”, dijo Valdés en una reunión que sostuvo recientemente en el municipio oriental de Bayamo.
Valdés reconoció que, respecto a la crisis de vivienda en la Isla, “no estamos haciendo lo que corresponde. La población en general lleva años esperando respuestas, razón por la cual es imprescindible trabajar con celeridad para resolver las afectaciones pendientes y atender prioridades”.
La crisis de la vivienda en Cuba tiene a millones de personas en precarias condiciones, esperando por años que se resuelvan sus problemas, sin embargo, el gobierno no suple la demanda.
Según datos oficiales, quedan más de 239.800 viviendas afectadas por ciclones, de ellas más de 44.000 anteriores al paso del huracán Sandy, que azotó el oriente del país en 2012.
Miguel Díaz-Canel había declarado en mayo, poco tiempo después de sustituir a Raúl Castro, que había que trabajar con varias alternativas, “con diferentes tipologías de viviendas, porque lo que puede funcionar en un territorio no necesariamente va bien en otro”, sin embargo, la pasada semana instó a los cubanos a que construyeran sus propias viviendas.
La crisis de la vivienda es uno de los problemas más graves que arrastra Cuba, dónde el 39% de los inmuebles se encuentran en regular o mal estado técnico, según datos del propio régimen. En la isla no se construyeron más edificios multifamiliares, y la producción de materiales de construcción ha disminuido considerablemente.