MIAMI, Estados Unidos.- “Cualquier país que hace negocios con Maduro y su Gobierno está dañando a propósito a los venezolanos”, aseguró la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley. La representante estadounidense presionó este lunes en Naciones Unidas al resto del mundo para que deje de cooperar con el régimen de Venezuela, acusando al gobernante, Nicolás Maduro, de liderar un “régimen corrupto” que amenaza la estabilidad regional.
La diplomática presidió una reunión informal del Consejo de Seguridad, organizada por la delegación estadounidense para analizar la crisis venezolana, que habitualmente no figura en la agenda de este órgano, publicó Diario de la Américas.
“Venezuela es una llamada de atención” para el mundo sobre la necesidad de actuar frente a la corrupción, pues ese tipo de comportamiento por parte de autoridades termina desembocando en problemas internacionales. Hemos estado hablando de Venezuela desde hace mucho tiempo, y ahora tenemos que hacer algo al respecto”, avisó Haley.
La diplomática denunció a los países que “están dando apoyo a Maduro” y a aquellos que se están enriqueciendo gracias al régimen: “tenemos que decir que ya basta”.
EEUU pidió al resto de Estados que sigan su ejemplo e impongan sanciones a funcionarios venezolanos, que les impidan el uso de sus estructuras financieras y que investiguen movimientos sospechosos de capitales.
También llamó a buscar fórmulas para romper el “control” que ejerce el régimen sobre la población gracias a la distribución de alimentos y medicinas y solicitó que se detenga cualquier financiación a las autoridades y empresas públicas, pues esos fondos terminarán siendo “robados”.
Las recomendaciones las hizo el subsecretario del Tesoro para Financiación Terrorista, Marshall Billingslea, que denunció ante el Consejo de Seguridad la “cleptocracia” en la que se ha convertido Venezuela.
La embajadora @nikkihaley deja claro cómo la Corrupción de @nicolasmaduro genera la peor crisis en Latinoamérica . Thanks Embassador for being a champion of our cause within UN pic.twitter.com/t1bndf0Iov
— CARLOS VECCHIO (@carlosvecchio) 11 de septiembre de 2018
“Bajo Maduro, la malversación, la corrupción y el fraude se han convertido en toda una política económica, destinada a mantener la lealtad de figuras del régimen que apoyan su continuidad”, subrayó.
Billingslea acusó al régimen venezolano de estar explotando ilegalmente los yacimientos de oro del país para su propio beneficio y de “robar” del sistema de distribución de alimentos a la población, articulado a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
Mercedes de Freitas, directora ejecutiva de la organización Transparencia Venezuela, intervino en la sesión y denunció que el país es “el ejemplo perfecto de la gran corrupción”, con responsabilidades al más alto nivel y total impunidad.
En esta cita no participaron países como Rusia, China o Bolivia, quienes el pasado año boicotearon una reunión parecida organizada por EEUU. Estos gobiernos defienden que la cuestión de Venezuela es un asunto interno, que no presenta una amenaza internacional y que, por tanto, no debe tratarse en el Consejo de Seguridad.
La semana pasada, esos y otros países rechazaron con los mismos argumentos la decisión de Washington de llevar ante el Consejo la situación en Nicaragua.
Haley, mientras tanto, defendió que es obvio que la crisis en Venezuela está teniendo un impacto fuera de las fronteras, principalmente con el éxodo masivo de venezolanos a países como Colombia, Perú, Brasil y Ecuador.
Y aseguró además que problemas regionales como el tráfico de drogas están agravándose por el “Gobierno corrupto de Venezuela”, e insistió en que el Consejo de Seguridad “debe hacer más” para responder a la amenaza que emana del país.
Haley acusó a Caracas de tratar de usar cualquier vía a su alcance para “distraer” a la opinión pública de la situación del país.