MIAMI, Estados Unidos.- Mauricio Claver-Carone e Yleem Poblete son dos de los cinco nombres que se barajan para determinar quién será el asesor de Donald Trump para Latinoamérica, reporta Infobae.
La presencia de no uno, sino dos cubanoamericanos entre los nominados a esa importante posición de política exterior incrementa la posibilidades de que alguno de ellos sea electo.
Mauricio Claver-Carone, uno de los aspirantes al cargo de asesor, es un abogado hijo de cubanos nacido en Florida, actualmente director ejecutivo del US Cuba Democracy PAC, principal grupo de cabildeo en Washington que defiende el embargo a Cuba, así como de la organización Cuba Democracy Advocates.
Claver-Carone es además columnista habitual en temas de política internacional en los medios de comunicación. Su blog, Capitol Hill Cubans, sirvió junto a otras plataformas para criticar duramente la política de Barack Obama de relajamiento con Cuba. Aboga por mantener las sanciones a La Habana hasta que haya elecciones libres, democracia y economía de mercado.
Por su parte, Yleem Poblete es nacida en Miami y es abogada y doctora en Política Mundial y Relaciones Internacionales por la Catholic University of America. Trabajó dos décadas como funcionaria de alto rango del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes y en la actualidad posee junto a su esposo una consultora de política y comercio internacional, Poblete Analysis Group.
También Poblete es una dura opositora al castrismo y defensora del embargo estadounidense a Cuba. Fue nombrada parte del equipo de transición de Donald Trump en el Consejo de Seguridad Nacional.
Cuba tiene un papel determinante en la política exterior estadounidense. El restablecimiento de relaciones diplomáticas con la isla comunista, impulsadas por el presidente Barack Obama, fueron un punto de debate en la pasada elección presidencial y el presidente Barack Obama ha querido establecer ese legado en la diplomacia de EE.UU.
Donald Trump, ganador de la contienda por el Ejecutivo, iniciará su mandato en menos de dos semanas, el próximo 20 de enero. El presidente electo prometió durante su carrera por la Casa Blanca que, de lograr el cargo, forzaría a las autoridades cubanas a conceder “un mejor trato” en las negociaciones bilaterales, amenazando el proceso de ‘deshielo’.
Más específicamente, Trump prometió, en especial a los votantes cubanoamericanos del sur de la Florida que lo apoyaron, que las relaciones con el régimen de La Habana quedarían mucho más condicionadas a que el gobierno cubano concediera más libertades básicas a sus ciudadanos.
Reporta Infobae que a los dos candidatos cubanoamericanos se unen en la lista el hijo de colombianos José Cárdenas y a la descendiente de inmigrantes Mexicanos Leah Campos.
El quinto candidato es el diplomático William Brownfield, actual subsecretario de Estado para la lucha internacional contra el delito y el narcotráfico. Oriundo de Texas y con un fluido español, Brownfield fue además embajador en Chile, Venezuela y Colombia.