MADRID, España.- El primer impreso en Cuba y publicación más antigua que se conserva en el país es la “Tarifa general de precios de medicina”.
El documento, que ya tiene 300 años, fue publicado en 1723 por el tipógrafo belga Carlos Habré, quien lo manufacturó el 13 de enero de 1722 en su casa taller de la calle San Agustín, actualmente calle Amargura, en La Habana. Y apareció publicado al mes siguiente, el 11 de febrero.
A Carlos Habré, emigrado a La Habana en la década del 20 del siglo XVIII, se debe la introducción de la imprenta en la Isla, pues al radicarse en Cuba llevó consigo un rudimentario taller tipográfico.
El único ejemplar de la “Tarifa general de precios de medicinas”, de treinta hojas sueltas sin paginar, fue encontrado en 1910 por el sabio cubano Manuel Pérez Beato.
Actualmente pertenece a la colección de Fondos Raros y Valiosos de la Biblioteca Nacional José Martí de Cuba. Se conserva como folleto en formato de 14 x 20 centímetros y consta de 29 páginas.
En la cubierta, encima del título, aparece un escudo real de España y se lee “En la HAVANA, con Licencia de los Superiores, en La Imprenta de Carlos Habré, 1723”.
Según recoge el portal Cubarte, en un acto oficial en el 2016, por el 115 Aniversario de la fundación de la Biblioteca Nacional de Cuba, su director, Eduardo Torres Cuevas, señaló que el documento “resulta de una importancia singular para historiadores y especialistas de distintas ramas del saber, pues constituye un ejemplo del desarrollo de la ciencia en Cuba en el siglo XVIII; y coincide con el proceso de fundación de la Universidad de La Habana (1721 a 1728)”.
Además, “pone al descubierto el alcance de la ciencia farmacológica, tanto por el conocimiento de los farmacéuticos, capaces de fabricar la medicina, como por la variedad de productos que se muestra en orden alfabético”; y “visto a través del arte tipográfico y el trabajo editorial, revela el desarrollo de la imprenta en el país”.