MIAMI, Estados Unidos. — Vicente de la O Levy, ministro de Energía y Minas del régimen cubano, reveló este jueves que la distribución de la sal que se le debe entregar a los cubanos se encuentra interrumpida por problemas de transportación.
El funcionario explicó en el espacio Mesa Redonda que el bajo estado técnico en las casillas de ferrocarril que transportan la sal ha hecho que más de 9 000 toneladas de ese producto se encuentran en almacenes del país.
Según O Levy, esa situación ha incidido en el déficit de cara a los consumidores, aunque dejó claro que sí hay sal para entregar a la población.
“Hay un equipo de personas pensando en cómo hacer para modificar las condiciones de las salinas, con el objetivo de que los trenes entren y puedan cargar en planchas, no en casillas, y así llenar los contenedores”, dijo el ministro en un fragmento de su intervención.
De momento, los encargados de llevar a cabo la tarea cuentan con 14 planchas de ferrocarril de las 100 que se prevé existan para poder mover la sal en los contenedores.
O Levy —designado para el cargo de ministro de Energía y Minas en octubre de 2022 en sustitución de Liván Arronte Cruz— informó que hace pocos días, gracias a “una operación de conjunto con las Fuerzas Armadas Revolucionarias” (FAR), se movieron por vía marítima unas 300 toneladas para los municipios de La Habana.
En Cuba existen nueves unidades empresariales básicas (UEB) que integran la Empresa de la Sal (Ensal), entidad que tiene como encargo social la producción, extracción, procesamiento, transportación y comercialización de la sal en todos sus surtidos y derivados.
La mayor parte de la producción de sal en Cuba está a cargo de la UEB de Guantánamo, que debe garantizar anualmente alrededor del 46 % del consumo nacional.