MIAMI, Estados Unidos. — El 23 de julio de 1923 nació en La Habana el pelotero cubano Luis Aloma, quien jugó en Grandes Ligas con los Medias Blancas de Chicago.
Apodado “Witto”, Aloma se destacó como lanzador de relevo. En 1944 firmó como agente libre aficionado con los Senadores de Washington. En la etapa con esa organización solo se desempeñó en Ligas Menores.
En 1949, tras varias temporadas sin debutar en las Mayores, Alomá fue enviado por Washington a los Tigres de Detroit. Pasó la temporada con los Buffalo Bisons, equipo categoría Triple-A de la Liga Internacional. Compiló un récord de 10–9 con una efectividad de 4.60 en 38 juegos, 22 como titular. Esta sería su única temporada en el sistema de los Tigres.
El 5 de agosto de 1949, el cubano fue enviado a los Medias Blancas de Chicago a cambio del lanzador Alex Carrasquel. Tenía 26 años cuando irrumpió en las Grandes Ligas el 19 de abril de 1950 con los Medias Blancas. Terminó esa temporada con un impresionante 7-2 y una efectividad de 3.80 en 42 juegos.
En 1951, Aloma continuó su éxito en Grandes Ligas con marca de 6-0 y efectividad de 1.82 en 25 juegos. Esta sería su mejor temporada en las Mayores. El 17 de junio de ese año llegó incluso a abrir un partido, en el que blanqueó a los Atléticos de Filadelfia con cinco hits. Fue la única apertura de su carrera, lo que lo convirtió en uno de los únicos cuatro jugadores en conseguir una blanqueada en su única apertura.
Estuvo nuevamente con Chicago en 1952 con marca de 3-1 con efectividad de 4.28 en 25 juegos. Ese año archivó seis juegos salvados, cifra récord en su carrera.
En 1953 compiló un récord de 2-0 con una efectividad de 4.70 en 24 juegos. Esta fue su última temporada lanzando a nivel de Grandes Ligas.
Luis Alomá murió el 7 de abril de 1997 en Park Ridge, Illinois, a los 73 años de edad.