LA HABANA, Cuba, 13 de mayo de 2013, Aleaga Pesant/ 173.203.82.38.- José Mujica, presidente de Uruguay llegó a La Habana. Lo hizo representado por la Murga de Santa Catalina, de Montevideo, que no lo idealizó, e hizo reír muchísimo a un público fundamentalmente latinoamericano, reunido en el Teatro Mella, este último sábado, para una ocasión que resultó única.
Con su desaliño permanente y una pequeña maceta en la mano, donde tenía sembrada una mata de mariguana (alusión a sus políticas por legalizar las pequeñas dosis del estupefaciente), entró al escenario “pepe” Mujica, como popularmente llaman todos al Presidente de Uruguay, y los cubanos, asombrados de tantas libertades, rieron a batirse en el espectáculo Las Cucarachas, escrito y dirigido por Tabaré y Yaname Cardozo .
Con una escenografía sencilla y un vestuario altisonante y divertido asomó el espectáculo de 90 minutos, lleno de divertimentos, sarcasmo, burla, agudeza irónica, coros, chistes verdes y políticos, gags, coreografías y la pegajosa música del carnaval. El espectáculo mantiene atención en todo momento; el público es llevado por la historia de la fiesta de las cucarachas, convencidas de que tras el fin del mundo por el bombardeo nuclear, solo ellas sobrevivirán.
Aunque la historia no es novedosa (las cucarachas intentando dominar el mundo de los humanos), la forma de tratarla, además del intercalado de los personajes, las canciones y los bailes, ofrecen una historia divertida y sugerente.
Si bien el comienzo fue un homenaje a una pequeña murga que existe en la escuela primaria de pueblo de Cojímar José Gervasio Artigas, y después la presentación del trovador Frank Delgado como telonero, llegó la murga uruguaya y hubo motivos para disfrutar.
Al desconocedor habanero llamó la atención el peso del chiste político en esta presentación, digna herencia de los reconocidos Les Luthiers. No quedó fuera del sarcasmo “el imperialismo”, la iglesia, el Presidente de Uruguay, o los argentinos, a los cuales se les “acusó” de pretender revertir el mundo ahora que tienen un Papa, una reina (la de Holanda) y un astro como Leonel Messi.
Pero para más divertimento del público que enarbolaba banderas uruguayas, se reían de ellos mismos, quejándose de ser tan chiquitos (Uruguay tiene una población de 3 millones de habitantes) y recibir tan poco del creador universal.
La Murga
La murga es por un lado un género coral-teatral-musical y, por otro la denominación dada a los conjuntos que la practican. Es una suerte de música popular desarrollada en varios países iberoamericanos, generalmente durante festividades como el carnaval, fiestas patronales, aniversarios de fundación o eventos deportivos. En Uruguay es muy popular. Suele ser interpretada por un coro con el acompañamiento musical de instrumentos de percusión.
La palabra murga tiene su origen en España. El origen del genero, de acuerdo a la definición del reglamento del concurso oficial de agrupaciones carnavalescas de Uruguay, se produjo en el año 1909 cuando llegó un grupo de Zarzuela y algunos de sus componentes salieron a actuar a la calle para “pasar el sombrero” si no convocaban suficiente público en sus funciones.
En 1910, una agrupación del Carnaval de Montevideo se autodenominó “Murga La Gaditana que se va”, para parodiar lo acontecido a los artistas españoles. A partir de ahí, la palabra empezó a usarse para denominar esos conjuntos que ya existían desde el siglo XIX y que hasta ese momento eran llamados “mascaradas”.
El género evolucionó, tanto en la música como en las letras. Se le añadieron elementos del Candombe -folclore afro uruguayo- y de otros ritmos que, adaptados a la batería de Murga introducida en 1915, le dieron nueva sonoridad, además de incluir a los personajes de la Comedia del Arte, adoptando los personajes de Momo, Pierrot y Colombina.
La murga uruguaya entona canciones y realiza cuadros musicales, con personajes y línea argumental, donde la temática principal ronda alrededor de acontecimientos de actualidad, con crítica política y social. Son el principal atractivo del Carnaval uruguayo que dura 40 días y convoca a decenas de miles de personas.