VILLA CLARA, Cuba. -Continúan en distintas regiones del centro de la isla las devoluciones de licencias de trabajo por cuenta propia, debido al acoso de la policía e inspectores del Organismo Nacional Tributario del Trabajo (ONAT).
Guillermo Prieto Sotolongo, ex trabajador particular que laboraba como vendedor de alimentos ligeros en el valle El Yabu, dijo que han sido muchos los cuentapropistas que perdieron sus ahorros, por las excesivas multas que aplican los inspectores y el abuso de los militares.
Dijo además que estas imposiciones son exageradas. Les decomisan mercancías e imponen elevadas sumas de dinero, solo por estar fuera del área establecida, productos no incluidos en los permisos de venta u otra falla que agregan para poder establecer las penalidades.
“La policía ha actuado de forma violenta con muchos trabajadores que solo buscan la ganancia diaria para sostener a su familia. Personas de bien, pacificas, las he visto protestar por estas situaciones y han sido arrastradas y llevadas a unidades policiales”, expresó Prieto Sotolongo.
Adonis Pedroso, vendedor de productos en el agromercado, destacó que estas sanciones implantadas por los funcionarios estatales, cada día son mayores, desde 500 a 1000 pesos, producto de que los mismos cobran una ganancia de estas cantidades para sus bolsillos.
“Los bajos salarios a los que el pueblo cubano ha sido sometido por tantos años provocan que, los que supuestamente cumplen la ley, busquen una forma de sustento”, manifestó Pedroso.