LA NACIÓN (Argentina).- La fecha clave sería este viernes. Ese es el día que, de acuerdo a una nota publicada por el diario brasileño O’Globo, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff , habría elegido para enviar al Congreso una enmienda constitucional que prevé adelantar la elección presidencial al 2 de octubre.
Esta acción del actual gobierno tendría lugar a una semana de que el Senado definiera el destino político de la mandataria: si da luz verde al proceso de impeachment en contra de Dilma, la jefa de Estado deberá abandonar el poder por 180 días.
Dilma y la mayoría de sus ministros, como Jaques Wagner (Casa Civil) y Ricardo Berzoini (Secretaría de Gobierno), apoyan la idea de la elección, pero aún no cuentan con el consenso de los movimientos sociales. Para el vicepresidente Michel Temer , adelantar las elecciones sería “un golpe de Estado”. Es que el dos de Dilma, que rompió la alianza con la presidenta tras denunciar que se sentía un funcionario decorativo, sería quien asumiría al frente del Palacio del Plenalto en caso que sea llevada a juicio .