LA HABANA, 23 (AP) - El gobierno confirmó hoy el arresto de dos cubanos residentes en Estados Unidos, acusados de tratar de llevar de contrabando a ocho emigrantes indocumentados a través del estrecho de la Florida, en un viaje en que perecieron una mujer y un niño.
Los detenidos, Sabino Serrano López y Luis Enrique Santiago Rodríguez, confesaron su participación en el viaje, dijo el Ministerio del Interior en una declaración publicada en el diario Granma, órgano del Partido Comunista de Cuba.
Ambos ``serán procesados y juzgados por las autoridades competentes de acuerdo con las nuevas leyes vigentes contra el tráfico de inmigrantes''.
En septiembre, dos residentes cubanos de Estados Unidos se constituyeron en los primeros acusados hallados culpables según una nueva ley cubana contra el contrabando de emigrantes. Uno de ellos fue condenado a cadena perpetua y el otro a 30 años de cárcel.
Un compañero cubano de los convictos fue condenado a 15 años de cárcel.
El Ministerio del Interior dijo que Estrella Ríos Nodarse, de 36 años, y su hijo Alexis Ernesto Márquez Ríos murieron en un accidente ocurrido en las primeras horas del jueves en aguas del Atlántico, a varios kilómetros de La Habana.
Prientes dijeron que Ríos y su hijo eran habitantes de Sagua La Grande, un puerto ubicado a unos 240 kilómetros al este de La Habana. Los parientes dijeron que el hijo tenía cuatro años de edad, en tanto que el ministerio dijo que tenía seis.
El ministerio dijo que los acusados penetraron en aguas cubanas en una lancha rápida alrededor de las 23:30 hora local del miércoles, recogieron a sus pasajeros e hicieron caso omiso de repetidas advertencias de la guardia costera cubana para que regresasen a tierra.
Los tripulantes de la patrulla costera trataron de advertir a los acusados acerca del daño sufrido por su embarcación al chocar contra una roca, dijo el ministerio.
Los acusados recogieron a los ocho emigrantes, entre ellos Ríos y su hijo, quienes se ahogaron cuando la nave se volcó debido a la mar gruesa y al exceso de ocupantes, agregó el ministerio.
Los oficiales de la patrulla rescataron a otros seis emigrantes y a los dos residentes, que fueron identificados como el capitán del barco, Serrano López, y su asistente, Santiago Rodríguez.
La guardia costera norteamericana dijo que, según informes recibidos de Cuba, la lancha había zozobrado a unos 25 kilómetros al norte de La Habana.
``Este nuevo hecho confirma la continuidad de un negocio inescrupuloso, que no repara en poner en peligro la vida de personas, y que responde a los intereses de las fuerzas más reaccionarias'', dijo el ministerio.
Estas fuerzas ``alientan el tráfico de inmigrantes, las salidas ilegales y pretenden obstaculizar los acuerdos migratorios entre Cuba y los Estados Unidos'', agregó.
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