Publicado el 22 de enero de 2001, en
El Nuevo Herald
La iglesia hace un milagro para los ancianos pobres
Vivian Sequera / Ap. La Habana
La audiencia aplaude ante la aparición del saxofonista, y algunos
audaces se lanzan a bailar "El Manisero''. Sorprendentemente ágiles,
los asistentes piden "otra, otra'' y el octogenario trío, compuesto
por un saxo, una tumbadora y una guitarra, les complace con el bolero "Dos
Gardenias''.
Previamente, los espectadores disfrutaron de un almuerzo de humeante sopa de
verduras, junto a una generosa ración de arroz con pollo. Comieron
bananas de postre. Y antes de la comida jugaron dominó. Otros vieron películas
en vídeo.
"La pasamos de maravilla. Yo, vaya, nunca quiero regresar a la casa'',
dice Aida del Valle, mientras da palmadas al ritmo de la música del trío.
"Yo me pongo mal cuando me voy de aquí. Esto me ayuda, me da
salud'', agrega Elena Ulloa, mientras arregla su abundante y larga cabellera
color marfil, revelando un rubio pasado, en medio de las sillas blancas de plástico
donde se alinean los asistentes al espectáculo musical.
Ulloa, de 80 años y Del Valle, de 74, vienen cada día cerca de
las 8 a.m. y se quedan hasta pasadas las 4 p.m., como otro centenar de ancianos,
a la llamada "Casa de los Abuelos la Milagrosa'', una suerte de club de
esparcimiento y salud para personas de avanzada edad
La población mayor de 60 años es casi el 14% de los 11
millones de cubanos, y el gobierno debe lidiar con una creciente presión
por atender a esos ancianos, cuando las arcas estatales apenas comienzan a salir
de la demoledora crisis económica que estremeció Cuba a comienzos
de los 90.
La iglesia, con el apoyo de donaciones privadas, intenta atender a los
ciudadanos de avanzada edad con proyectos como el de La Milagrosa, enclavada en
Santos Suárez.
En toda la isla el gobierno mantiene las llamadas 'casas de abuelos', pequeños
locales que se vieron literalmente abandonados en medio de la crisis económica,
y que sólo ahora comienzan a renacer. En muchos de esos lugares dan
comida pero no hay mayores actividades, o a la inversa.
Fue el párroco de una iglesia vecina, el sacerdote español José
María Lusarreta, quien tuvo la idea de establecer el centro para los
abuelos. Cuando llegó a Cuba hace 6 años y comenzó a
conocer a los vecinos de su barriada, descubrió la soledad y pobreza en
la que muchos vivían.
"Esto es bonito, pero lo más importante es que quita soledad'',
comenta Lusarreta, de 62 años, mientras vigila cada detalle del hogar.
Allí "se crea un ambiente de esperanza. No están solos y se
divierten, y a la vez mejoran su alimentación''.
El centro comenzó en 1997 con 12 ancianos, quienes gradualmente
pasaron la voz entre sus vecinos sobre ese sitio donde podían comer,
hablar con otros de su edad, entretenerse con juegos, y recibir atención
médica primaria. La residencia fue creciendo hasta llegar hoy a 175
miembros.
Los requisitos para ingresar al centro son: vivir solo, tener una jubilación
o pensión muy baja -- en promedio unos 80 pesos al mes -- no recibir
ayuda económica de familiares en el exterior, ni ningún tipo de
amparo de parientes.
"A nosotros nos tocó nada más que trabajo y ahora mírenos...
no uso calzoncillos porque no tengo, ni puedo comprar'', afirma Alberto Martínez,
de 72 años, y un jubilado del sistema de ferrocarriles, donde era mecánico.
Pero en la residencia "estamos mejor... yo hace mucho tiempo que no trataba
con gente tan cariñosa'', agrega Martínez, mientras alista la mesa
para jugar dominó.
"Este bienestar se lo debemos al padre (Lusarreta)'', dice Nicolasa
Ordoñez, de 97 años y con un cigarrillo colgando de su labio,
mientras acerca su cabeza, cuyos ojos ya no ven, al sacerdote. "¿Usted
se acuerda padre? Usted me dio el primer desayuno. Usted mismo, pan con queso y
un vaso de (bebida de) chocolate''.
Risueña, Nicolasa bromea que está muy vieja, pero con muy
buena memoria y ánimo. "El padre me cuida y yo viviré mas años
aquí feliz''.
Pésima alimentación en asilos estatales
Cubanet. La Habana
Pésimamente alimentados están los ancianos en las llamadas "casas
de los abuelos'', especie de asilos diurnos de La Habana.
Desde hace cuatro meses, los viejitos sólo reciben una magra ración
de arroz, potaje aguado de chícharos, ocasionalmente un huevo hervido, o
en su lugar un pedazo de papa o plátano hervido.
Como desayuno y merienda: un vaso pequeño de leche y un sorbo de café.
Para tener "derecho'' a esta alimentación los ancianos pagan 25
pesos al mes.
En la casa de los abuelos "Alegría de Vivir'', de la calle
Enrique Barnet, en La Habana, hace seis meses que sus asociados no toman leche
en la merienda. Igual ocurre en la casa de los abuelos ubicada en la esquina de
Reina y Gervasio, del mismo municipio.
"Tengo que inventar cualquier excusa para salir un momento y así
poder comerme una pizza. Esto lo puedo hacer gracias a mi hija que vive en
Estados Unidos y me manda una ayuda en dólares'', expresó un
anciano de 80 años, cuya identidad no reveló.
La Habana replica a Alemania y presenta cargos contra checos
Servicios De El Nuevo Herald. Berlin
Cuba respondió ayer a Alemania señalando que rechaza toda
injerencia, presión o intimidación externa para poner en libertad
a los dos ciudadanos checos detenidos el 12 de enero, y afirmó que ambos
serán sometidos a la justicia por violar leyes cubanas.
Un día después de haber sido convocado al ministerio alemán
de Relaciones Exteriores, el embajador cubano en Berlín, Marcelino
Medina, entregó una nota diplomática que afirma que La Habana "no
puede aceptar acciones que menoscaben su soberanía, que violen sus leyes
y que atenten contra su integridad y su independencia''.
El diputado checo Ivan Pilip y su compatriota Jan Bubenik fueron detenidos
por contactar a disidentes.
Ambos fueron acusados por las autoridades cubanas de "asociación
encaminada a provocar una rebelión'', según dio a conocer ayer el
portavoz de la cancillería checa, Ales Pospisil.
Este artículo figura en un capítulo del código penal
cubano dedicado a "Delitos contra el Estado'', precisó Pospisil en
la radio de Praga.
La nota entregada al ministerio de Exteriores alemán señala
que los acusados fueron "sorprendidos mientras promovían la subversión
interna en el país'', a "favor de los intereses de una potencia
extranjera'' y "han violado su condición de turistas, sobre la base
de la cual se les permitió la libre entrada''.
Pilip y Bubenik "llegaron a Cuba en función y con mandato de la
Freedom House'', de EU, "para contactar a elementos contrarrevolucionarios,
darles instrucciones y entregarles recursos'', afirmó el gobierno de La
Habana.
Por otra parte Josef Marsice, encargado de negocios checo en Cuba, los visitó
el sábado y dijo que Pilip y Bubenik están en espera de asistencia
legal.
"Están bien de salud, pero las condiciones en la cárcel
no son las más cómodas'', dijo una emisora de radio checa.
La emisora también señaló que ambos fueron separados y
que comparten celdas de seis metros cuadrados junto a otros tres prisioneros.
21 de enero
Una madre cubana evoca cómo 'la seguridad' le mató a su hijo
Ketty Rodriguez. El Nuevo Herald
Nunca antes desde que Fidel Castro llegó al poder había visto
la ciudad de Regla, separada de La Habana sólo por la entrada de la bahía,
una prueba de indignación popular tan estremecedora.
Todo comenzó la madrugada del 12 de octubre de 1993.
Hacía tres horas que su hijo Luis, de 22 años, había
salido en un tractor con ocho amigos hacia la playa de Celimar, donde abordaría
una balsa para irse a Estados Unidos, cuando Esther Quevedo tuvo un terrible
presentimiento.
Sentada frente a una imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre y con una
vela encendida, que se apagó tres veces, la mujer sintió que le
habían matado a su hijo.
Luis Quevedo y sus amigos fueron interceptados por agentes de la seguridad
del estado cubana antes de llegar a la playa. Al escuchar que les disparaban,
todos corrieron y pudieron escapar. Todos, menos uno: Luis.
Al otro día, uno de los sobrevivientes que presenció a
escondidas el asesinato fue a la casa de los familiares para contarles lo
sucedido.
"Le dieron un tiro por los testículos, le partieron los dientes,
los pómulos y lo golpearon en la cabeza'', le relató el testigo a
Esther, quien llegó recientemente a Miami como refugiada política.
"No me den más, que las piernas se me van'', fueron las palabras
del joven. "Ya tenía hemorragia interna'', comenta ahora la madre en
medio del llanto incontenible.
Un alto oficial cubano aseguró a la familia que la muerte de Luis
Quevedo había sido accidental. "Le fui arriba y le caí a
golpes'', recordó Esther, "y le dije asesino''.
El cadáver fue entregado a los familiares en estado de descomposición
para borrar las huellas de la golpiza. Desesperada, Esther rompió el ataúd,
revisó el cadáver de su hijo y se desmayó cuando le vio los
dientes partidos.
"!Abajo Fidel, abajo el comunismo, abajo la tiranía!'', salió
a gritar en plena calle, y una multitud fue tras ella.
"Todo el mundo me siguió, incluso aquellos que simpatizaban y
estaban comprometidos con el sistema. Yo no obligué a nadie'', cuenta
Esther. A partir de ese momento, ella y su familia fueron objeto de persecución,
amenazas y encarcelamientos sucesivos.
"Encerraron a dos de mis otros siete hijos --Daniel Santana y Manuel
Paz-- y les dieron tremendas palizas'', dice.
Representantes del gobierno le hicieron ofrecimientos --como darle una casa
y otros privilegios-- para hacerla callar. "Yo no quiero nada, perros; lo único
que quiero es la vida de mi hijo, y ustedes se la quitaron'', fue su respuesta.
La mujer desafió, durante los últimos siete años de su
estancia en Cuba, a los comités de defensa de la revolución (CDR)
y sus mítines de repudio. Enfrentó a agentes de las fuerzas de
seguridad del régimen castrista; les insultó y les escupió
la cara.
"Conmigo no se llegaron a meter. No se atrevieron, a pesar de que
siempre les decía la verdad'', recuerda.
Su casa fue sometida a innumerables y minuciosos registros en busca de
propaganda contra el gobierno.
"Para tumbar a Fidel hay que hacerlo subversivamente y no con proclamas
bobas. Con eso no voy a ganar nada'', les decía Esther a los agentes.
En una oportunidad le ofrecieron una "salida deshonrosa'' del país,
que fue rechazada de plano. "Ustedes no tienen moral para eso. Yo soy una
mujer de principios (...) y me voy de mi país cuando yo quiera'', les
respondió.
Hace tres meses, y después de innumerables negativas, vino a Estados
Unidos. Hoy vive en un humilde apartamento de La Pequeña Habana con una
amiga de la infancia. No tiene trabajo, y la ayuda del gobierno federal, que
dejará de recibir dentro de poco, es de $180 al mes.
"Estoy enferma de los nervios. Esto ha destrozado mi vida... Desde
1974, cuando fusilaron a mi hermano, estoy sufriendo las desgracias del
comunismo'', asegura.
Desde lejos extraña su patria y teme que el gobierno tome represalias
contra el único hijo que le queda en la isla, Eduardo Paz, de 38 años.
Cuba es una gran hipocresía, dice. "Lo único que espera
la gente es la muerte de Fidel''.
Berlín demanda la liberación de los checos
El embajador cubano fue llamado a la cancillería germana
Servicios De El Nuevo Herald. Berlin
El embajador de Cuba en Alemania, Marcelino Medina, fue convocado ayer al
Ministerio de Relaciones Exteriores de la nación germana, donde le
comunicaron la exigencia de Berlín de que sean liberados los dos políticos
checos encarcelados en La Habana, informó esa instancia de gobierno.
El diplomático fue citado por orden del ministro alemán de
Relaciones Exteriores, Joschka Fischer. El jefe del departamento político
del ministerio, Thomas Matussek, transmitió a Medina la petición
de Berlín.
El diputado checo y ex ministro Ivan Pilip y su compatriota Jan Bubenik
fueron detenidos el 12 de enero por mantener contactos con disidentes cubanos.
Entretanto, la esposa del legislador detenido en Cuba salió ayer
rumbo a La Habana acompañada por el hermano del otro checo arrestado, a
fin de averiguar los detalles del polémico caso y procurar la libertad de
los detenidos.
Lucie Pilipova, esposa de Ivan Pilip, arrestado el 12 de enero por reunirse
con disidentes cubanos, viajó acompañada de Martin Bubenik,
hermano de Jan Bubenik, el otro detenido. Se cree que ambos serán
enjuiciados por acusaciones de realizar actividades subversivas y de "ser
agentes norteamericanos'', según dijo el oficial diario Granma, órgano
del Partido Comunista Cubano.
"En cuanto llegue allí voy a tratar de contactar a los
funcionarios cubanos y pedir que se me permita ir a la prisión'' donde
está recluido mi esposo, afirmó Pilipova a la radio checa poco
antes de partir.
"Sólo tenemos un objetivo, que es darles fuerzas'', indicó
Bubenik.
Según la cancillería, Cuba no ha suministrado información
oficial alguna acerca del estado de ambos prisioneros ni de las acusaciones que
se les imputan. El canciller checo Jan Kavan pidió ayuda a la Unión
Europea y el primer ministro Milos Zeman envió una carta personal al
dictador cubano Fidel Castro para solicitar la excarcelación de los
detenidos. Se ha informado que el presidente Vaclav Havel ha pedido al papa Juan
Pablo II que interceda para lograr la libertad de los prisioneros.
Havel, que fue durante largo tiempo disidente anticomunista, aseveró
que las acusaciones formuladas contra los checos eran falsas, y que el arresto
tenía motivos políticos.
Por otra parte, un ex asesor checo del Che Guevara, el economista Valtr
Komarek, acompañará a una delegación parlamentaria checa
que viajará a La Habana para tratar de obtener la liberación de
los dos checos, anunció ayer el periódico Lidove Noviny, de
Praga..
Komarek, de 70 años, fue durante tres años, a principios de la
década del 60, asesor económico del Che Guevara (1928-1967), quien
por entonces ocupaba el cargo de ministro cubano de Industria.
Poco después de la "revolución de terciopelo'' de
noviembre de 1989 y la caída del comunismo en Checoslovaquia, Komarek fue
viceprimer ministro del gobierno federal.
Petra Buzkova, vicepresidenta de la Cámara de Diputados, quien
encabezará la misión a La Habana, invitó a Komarek, miembro
del Partido Socialdemócrata (CSSD), a unirse a la delegación.
Komarek no se mostró muy optimista con respecto al resultado final de la
misión. "Temo por la eficacia del viaje'', declaró al periódico.
La fecha de partida de la delegación checa aún no fue fijada.
Creciente el rechazo internacional por las detenciones
Pablo Alfonso
El arresto del diputado y ex ministro de Finanzas, Ivan Pilip y del ex
dirigente estudiantil Jan Bubenik, ocurrido hace una semana en Ciego de Avila,
ha puesto al régimen de Fidel Castro en la mirilla internacional.
Las acusaciones de "agentes al servicio de Estados Unidos'' publicadas
en Granma no han despertado ni siquiera suspicacia en las cancillerías de
Europa, Canadá o América Latina. Lo único que han provocado
es una sonrisa irónica, ante una acusación tan desgastada; o quizás
alguna interrogante por conocer qué está sucediendo en La Habana.
Por supuesto, la acción ha provocado el rechazo inmediato de gobiernos
democráticos e instituciones internacionales de derechos humanos.
La crisis de los checos, es una más en la galopante cadena de sucesos
que la dictadura cubana ha montado en apenas dos meses: la denuncia de atentado
en Panamá, las críticas a corresponsales extranjeros en La Habana
y el show propagandístico contra la cabalgata de Los Reyes Magos españoles.
Ninguna de ellas, sin embargo, tiene las consecuencias que pudieran derivarse de
esta nueva pirueta castrista. Aunque todas tienen el inquietante sello de una
irritabilidad que va en aumento en los círculos del poder castrista.
El arresto de Pilip y Bubenik, figuras políticas ampliamente
conocidas en su país, no ha sido sustentado hasta ahora con ninguna
evidencia que justifique las acusaciones oficiales en su contra. La policía
política no ha podido ni siquiera lograr una declaración de
culpabilidad por parte de los opositores, Antonio Femenías y Pedro
Valdivia, quienes recibieron a los checos en Ciego de Avila. Ambos han negado
categóricamente haber recibido de ellos dinero o propaganda subversiva,
como alega el régimen.
Castro ha creado esta crisis a las puertas de dos reuniones internacionales
de importancia para Cuba: las sesiones de la Comisión de Derechos Humanos
de Naciones Unidas, que tendrá lugar en Ginebra en marzo y la reunión
anual de la Unión Interparlamentaria señalada para celebrarse en
La Habana el próximo mes de abril.
El pasado año, la República Checa y Polonia auspiciaron en
Ginebra una resolución que condenó a la dictadura cubana por
violar los derechos humanos. Para algunos analistas internacionales, con el
arresto de los checos, Castro estaría tratando de neutralizar este año
el papel del gobierno de Vaclav Havel, obligándolo a negociar con La
Habana la liberación de los ciudadanos checos a cambio de una posición
diferente en Ginebra.
Como bien señaló el jueves un editorial del diario The
Washington Post "De ser así, [los cubanos] están cometiendo
un gran error. Como pudiera atestiguar Mijail Gorbachov, los dirigentes
comunistas han subestimado al señor Havel y a sus compatriotas a su
propio costo''.
El arresto de Pilip un diputado en activo y de Bubenik, ex diputado y
dirigente estudiantil, puede provocar también un boicot de los
parlamentos democráticos a la Reunión Interpalamentaria Mundial
programada para abril en La Habana. Parlamentarios checos y de otros países
de Europa han comentado ya que están dispuestos a boicotear el encuentro.
Cuba ganó esa sede luego de complejas maniobras diplomáticas
en las que jugó un papel importante el presidente de la Asamblea
Nacional, Ricardo Alarcón. Ahora, es posible que ese éxito político
se le disuelva en las manos a Alarcón, como una pompa de jabón.
Además de los políticos, la Iglesia Católica Checa ha
intervenido también en la crisis. El Cardenal Miloslav Vlk dirigió
una carta a su homónimo cubano el Cardenal Jaime Lucas Ortega y Alamino
solicitando su ayuda. Según declaró Vlk en Praga, la detención
de ambos checos es absurda y en el caso de Pilip, como católico, merece
ver a un sacerdote.
"Las acusaciones presentadas contra estas personas son absurdas y de
hecho no se les ha permitido contacto con la representación checa, lo que
constituye una flagrante violación del derecho internacional. Estoy
convencido que tales acciones por parte de las autoridades de su país,
ante los ojos de la opinión pública mundial, de ninguna manera
tendrán resultados positivos'' escribió el Cardenal Vlk al
encargado de negocios de Cuba en Praga, David Paulovich.
palfonso@herald.com
Una herencia millonaria impacienta a Cuba
Gerardo Reyes. El Nuevo Herald
Miles de cubanos de la isla, herederos de quien se cree fue una monja
millonaria que depositó una enorme fortuna de lingotes de oro en el Banco
de Inglaterra, esperan con impaciencia que el gobierno cubano cumpla con un
ofrecimiento de pago de la herencia que podría sacarlos de su pobreza.
Pero las esperanzas parecen más reales que la misma fortuna pues los
voceros del banco aseguran que no hay ningún documento que respalde la
existencia de los depósitos hechos hace más de 200 años.
"Revisamos los archivos del Banco de Inglaterra y no encontramos
ninguna referencia relacionada con la herencia de Manso de Contreras o
similares'', afirmó una portavoz del banco a El Nuevo Herald. "Por
lo tanto no se contempla ningún desembolso inminente''.
No obstante, en Miami, la prestigiosa firma de abogados Holland & Knight
está investigando la legitimidad de la millonaria reclamación en
medio de una gran discreción.
El gobierno cubano prometió que entregará a cada uno de los
20,000 descendientes de la familia Manso de Contreras que viven en la isla,
hasta $4 millones en cuotas mensuales de $350, las cuales podrán ser
retiradas con una tarjeta de débito, según aspirantes a la
herencia y visitantes de la isla que hablaron con El Nuevo Herald.
Además de la tarjeta de retiro, los herederos tendrán derecho
a comprar un automóvil y una casa. A las mujeres, más no a los
hombres, se les permitirá renunciar a sus puestos de trabajo, pero en
cualquier caso no podrán salir del país, explicaron las fuentes.
El plan de pago ha desatado un ambiente de euforia en la isla a medida que
se acerca la fecha --finales de este mes-- que el gobierno señaló
para empezar su implementación, aseguraron familiares en Miami.
"En Cuba se está viviendo un verdadero frenesí con esta
historia de la herencia'', indicó una pariente en Miami de los
descendientes en Cuba. "Allá están a la espera de recibir ese
dinero pronto''.
Algunos de los familiares entrevistados por El Nuevo Herald prefirieron no
ser identificados por temor a represalias en Cuba
Pero el ambiente también es de confusión.
La entrega del dinero fue postergada desde finales de noviembre hasta
finales de enero y todavía no hay señales convincentes de que el
gobierno esté en proceso de desembolsar los fondos. Ninguno de los
herederos ha recibido la tarjeta prometida.
Algunos de los aspirantes al legado sostuvieron que han sido entrevistados
por abogados cubanos que aseguran estar representando al banco de Londres.
Pero la portavoz de la institución financiera sostuvo que no estaba
ni segura de que siquiera exista una solicitud formal del gobierno cubano sobre
los supuestos depósitos.
La actitud general de los descendientes en Cuba ha sido la de continuar con
las gestiones bajo la premisa de que lo último que se pierde son las
esperanzas, le comentó a El Nuevo Herald una de las herederas que más
conoce la historia de la esquiva fortuna.
Margueritte Padín Ladrón de Guevara, quien lleva 12 años
buscando la herencia y ha viajado tres veces a Cuba, explicó que hay un
gran sentido de solidaridad entre los herederos, lo cual facilita la búsqueda
de partidas de nacimientos, testamentos y recortes periodísticos. Al
final de la cadena, los documentos son entregados a los comités de
herederos como respaldo a los frondosos árboles genealógicos que
se han formado para sustentar el reclamo.
"De esa manera he conocido a muchos parientes y gente muy buena del
campo que me ayudaron a encontrar mis antepasados'', explico Padín al
relatar su visita de un mes a la isla en abril del año pasado.
Según otros visitantes, los detalles de la repartición de la
herencia pasan de boca en boca en Cuba --y se le agrega una que otra especulación--,
luego de que son filtrados por abogados del gobierno a los comités de
herederos que se han creado en la región central de la isla durante los
dos últimos años.
En esa región, donde se concentra la mayor población de
descendientes de la familia Manso de Contreras, los comités de herederos
se reúnen una vez al mes para informar a sus integrantes sobre la situación
de sus peticiones.
La suma prometida es el gran aliciente: para los estándares de la
isla, $350 resulta un ingreso extraordinario si se considera que el sueldo de un
médico con experiencia no sobrepasa $30 al mes.
Mientras los cubanos de la isla esperan una decisión, los
descendientes en Estados Unidos no se quedan atrás.
Padín explicó a El Nuevo Herald que la firma de abogados
Holland & Knight de Miami está investigando la legitimidad del
reclamo de la herencia, cuyo monto los herederos calculan --más con el
corazón que con la razón-- en $300 mil millones.
Explicó que desde hace dos meses está en comunicación
con el abogado Christopher Boyett de la prestigiosa firma de Miami.
Pero la oficina ha mantenido en secreto su indagación preliminar.
Aparentemente las llamadas relacionadas con el tema han inundado la firma,
pues antes de que un reportero de El Nuevo Herald mencionara la razón de
su solicitud, la secretaria de Boyett respondió que si se trataba del
asunto de los Manso de Contreras también estaba a cargo el abogado Juan
Bendeck
Ninguno de los abogados devolvió llamadas de El Nuevo Herald.
En su visita a los pueblos de Caibarién, Remedios y Camajuaní,
de la provincia de Villa Clara, en el centro de la isla, y Tamarindo, en Ciego
de Avila, Padín se entrevistó con parientes lejanos que expresaron
su satisfacción por el anuncio del gobierno cubano de que la herencia sería
distribuida a finales del año 2000.
Los herederos de Cuba comentaron que recibirán, según palabras
de Padín, "una especie de tarjeta ATM'' que les permitirá
retirar sumas hasta de $300 mensualmente.
"Es como una tarjeta gold de racionamiento'', bromeó un
profesional cubano de visita en Miami quien también conoce de las ofertas
del gobierno.
Padín quedó sorprendida al descubrir que muchos de los
descendientes en Cuba tenían en su poder un recorte de El Nuevo Herald
con un reportaje sobre su larga búsqueda de la herencia publicado en
febrero del 2000.
"Una de ellas [la secretaria de la parroquia de Remedios] me reconoció
por la foto'', aseguró.
El origen de esta fiebre de oro se remonta al año 1789 cuando, según
la leyenda, una monja de apellido Manso de Contreras entregó al sacristán
del convento de las Clarisas de La Habana una gran cantidad de lingotes de oro
para que la depositara en el Banco de Londres.
La monja era hija de un acaudalado capitán de la corona española
que se llamaba Bartolomé Manso de Contreras y Hernández de Medina,
quien tuvo otras dos hijas que también se hicieron religiosas a mediados
del siglo XVIII en Cuba.
Una de ellas, no se sabe a ciencia cierta cuál, ingresó al
convento huyendo de la vergüenza de un embarazo en soltería. En esa época,
algunas muchachas abortaban en las abadías, y como castigo social
ofrendaban su vida a la clausura religiosa. Pero la joven se negó a
abortar y le entregó su hijo al sacristán del convento con el
encargo de que la fabulosa herencia que le correspondía fuera depositada
en el Banco de Londres, lejos de los garfios de los piratas ingleses que
saqueaban el Caribe.
Bajo un nombre falso, cuenta la leyenda de la familia, el sacristán
viajó a Inglaterra en un buque llamado El Titán y depositó
el botín de oro.
Desde entonces, en la historia de Cuba quedaron registrados varios episodios
espasmódicos de la fiebre por la herencia, los cuales incluyeron reclamos
oficiales del gobierno de la isla al banco inglés por la supuesta
suspensión del pago de intereses; versiones de que algunos abogados de la
familia que hicieron el reclamo a mediados del siglo pasado fueron asesinados y
otras leyendas que alimentaron las esperanzas de todos aquellos que encontraban
una rama de su familia enredada con el árbol genealógico de los
descendientes, casi todos pobres, de la monja millonaria.
En 1947 una de estas olas de indignación por la falta de pago se hizo
evidente en un aviso publicado a la entrada del Hotel Isla de Cuba en Camagüey.
Se trataba de un largo memorando sobre la historia de la familia escrito por
el delegado investigador de la herencia, el doctor Octavio Blaque Reyes, en el
que advertía: "Si con esta bomba atómica no conseguimos
ablandar los corazones y llegar a una comprensión con los herederos,
debemos abandonar la ruta''.
La disidencia debate sobre los derechos humanos
Los opositores quieren llevar la discusión a todo el país
y entregar las conclusiones a las autoridades a fines de año
Agence France Presse. La Habana
Una veintena de opositores inició ayer en La Habana una "Mesa de
debate integral de Derechos Humanos'', que aspiran a extender por todo el país,
alimentar en la consulta popular y presentar las conclusiones a las autoridades
cubanas a fines de año.
Se trata de un debate "despolitizado y constructivo'', señaló
Manuel Cuesta Morúa, moderador de la Mesa de Reflexión de la
Oposición Moderada, una de las 10 organizaciones opositoras
participantes, y a cuya iniciativa se debe este proyecto.
La oposición cubana cuenta con unas 100 pequeñas
organizaciones de todos los colores políticos que funcionan de manera
ilegal.
Según Cuesta Morúa, los organizadores del debate tienen el
propósito de ir sumando grupos y personas en general a este proyecto, que
durante el año 2001 debe recorrer "la isla a lo largo y ancho'',
para conformar una especie de carta.
Ese documento será sometido a consulta ciudadana en las comunidades
por medio de los activistas de la oposición, quienes recogerán "el
criterio ciudadano'' para incorporarlo a la redacción de la carta y,
finalmente, presentarlo a las autoridades, agregó Cuesta Morúa.
La reunión inicial de la "Mesa de debate integral de Derechos
Humanos'' tuvo lugar en el barrio habanero de Santos Suárez, en una casa
cuyo propietario, Rafael Ernesto Avila, miembro del Partido Popular, fue
detenido en horas de la mañana de ayer, según informaron los
organizadores.
La detención fue calificada por Cuesta Morúa como "una señal
equivocada'' de las autoridades, ante un encuentro que, destacó, tiene un
espíritu constructivo y pacífico.
20 de enero
Havel exige a Castro la liberación de los checos
Los presidentes de Eslovaquia, Hungría y Polonia se unen a Vaclav
Havel para protestar por la arbitrariedad de La Habana
Pablo Alfonso. El Nuevo Herald
El presidente de la República Checa, Vaclav Havel, exigió el
viernes la libertad inmediata de dos prominentes checos detenidos en Cuba la
pasada semana tras reunirse con opositores internos en la isla, y que el régimen
de Fidel Castro acusa de "agentes de Estados Unidos''.
"Se nos ha dicho, no oficialmente, que el diputado Ivan Pilip y el ex
activista estudiantil Jan Bubenik han sido acusados de ser agentes del
imperialismo estadounidense, y eso me ha dolido singularmente porque recuerdo
que yo fui acusado de lo mismo durante 30 años'', declaró Havel."Los
cargos en su contra son falsos y la República Checa hará todo lo
que esté a su alcance para obtener su libertad''.
Antonio Femenías, uno de los dos opositores que se reunieron con los
checos en Ciego de Avila, reiteró ayer por teléfono desde esa
ciudad, que no recibieron de ellos ni dinero, ni propaganda subversiva.
"Ellos nos visitaron a título personal, no venían en
representación de ninguna organización política
internacional, ni del exilio cubano'', subrayó Femenías. "El
interés era el de conversar sobre sus experiencias políticas y las
nuestras''.
El arresto de los checos y las amenzas del régimen de juzgarlos como
agentes extranjeros, ha desatado una ola de protestas a la que se unieron ayer
los presidentes de Eslovaquia, Hungría, y Polonia reunidos con Havel en
el castillo de la localidad polaca de Pszczyna para analizar el ingreso de sus
países a la Unión Europea.
El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer, calificó
de "inaceptable'' la detención en Cuba de los políticos
checos, en un comunicado de la cancillería.
"Desde el punto de vista del Gobierno alemán, el proceder de las
autoridades cubanas es absolutamente inaceptable'', subrayó Fischer.
Amnistía Internacional (AI) ha instado a las autoridades cubanas a
asegurar a los checos detenidos todos los derechos que estipula el Derecho
Internacional, incluido el de asistencia consular y jurídica. AI pidió
a Cuba que aclare de qué acusan a los checos.
La crisis creada con el arresto de Filip y Bubenik obligó al gobierno
checo a celebrar una reunión de urgencia, en la que se aprobó una
resolución que expresa "profunda preocupación'' por el
proceder de Cuba. La declaración señala que con el arresto de los
dos checos, Cuba viola el artículo 36, párrafo 1 del Acuerdo de
Viena sobre consultas en las relaciones entre los estados, número
32/1969.
Una semana después del arresto de sus dos ciudadanos en Cuba, Praga
está buscando todavía la forma de hacer llegar al régimen
castrista las notas de la cancillería checa sobre el caso. La Habana se
niega a recibir ningún documento de manos de las autoridades checas y al
mismo tiempo no ha presentado evidencias para sustentar sus acusaciones contra
Filip y Bubenik, quienes habían viajado a Cuba como turistas.
Cuba autorizó el viernes la visita de un grupo de diputados checos,
integrada por representantes de todos los partidos políticos con asiento
en el Parlamento, que quieren negociar en La Habana la liberación de sus
compatriotas.
La televisión checa informó que Lucie Pilipova, esposa de
Pilip, partirá hoy sábado rumbo a Cuba y será autorizada a
visitar a su esposo en el centro de detención en el que se encuentra
recluido. Pilipova irá acompañada por Martin Bubenik, hermano de
Bubenik.
El canciller checo Jan Kavan ha interrumpido prematuramente su
convalescencia, después de una operación al corazón, para
enviar cartas a los cancilleres de países de la Unión Europea, de
países asiáticos y de la mayoría de los países
latinoamericanos.
Según el portavoz de la cancillería, cada uno de esos países
podría prestar ayuda a su manera. Añadió que Kavan espera,
sobre todo, ayuda de España , país que ha dado a entender que
respaldará el esfuerzo comunitario por la liberación de Pilip y
Bubeník. La cancillereía checa, espera también los buenos
oficios de la vecina Eslovaquia que se ha ofrecido para entregar a las
autoridades cubanas los documentos relacionados con la detención de Pilip
y Bubenik, que La Habana se niega recibir de las autoridades checas.
Costa Rica no deportará a 21 refugiados cubanos
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
El gobierno de Costa Rica negó ayer que esté considerando la
posibilidad de deportar a los 21 cubanos que llegaron a ese país
centroamericano a comienzos de este mes, tras escapar de la isla a bordo de una
embarcación pesquera.
"Indudablemente, ha habido una interpretación inadecuada del
documento emitido por la fiscalía general de la nación'', dijo
Vilma Ibarra, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores. "Porque de
ese informe a la deportación hay un gran trecho''.
Aunque la funcionaria declaró a El Nuevo Herald que la cancillería
no va a hacer ningún pronunciamiento oficial respecto a la resolución
del Ministerio Público, indicó que "la primera decisión
de las autoridades costarricenses de otorgarles [a los cubanos] un permiso
temporal, habla de una voluntad de estudiar el caso para extenderles un status
de permanencia en el país''.
Los 21 cubanos, que salieron de Santa Cruz del Sur, Camagüey, el 31 de
diciembre y llegaron a Puerto Limón el 6 de enero, fueron admitidos en
Costa Rica con un permiso temporal de la Dirección Nacional de Migración
(DNM) costarricense.
La presunta confusión sobre el destino de los balseros provino de una
afirmación del informe fiscal: "Si de las investigaciones efectuadas
y normativa aplicable resultara procedente la extradición de los
ciudadanos cubanos que ingresaron a nuestro país, deberá ser
gestionada por las vías existentes''.
Cuba calificó la fuga "como un peligroso acto de piratería,
que puso en peligro la vida de indefensos pescadores''. Sin embargo, el informe
dirigido a la cancillería costarricense --enviado también al
gobierno cubano a través del recién abierto consulado de San José--
delimita "el principio de territorialidad'' para la posible aplicación
de sanciones a los refugiados.
"Los hechos incriminados no fueron cometidos por personas al servicio
de nuestro país; no fueron perpetrados contra algún costarricense
o sus derechos, ni pueden producir resultados en nuestro territorio'', dictaminó
fiscalía.
Ibarra señaló que cualquier decisión sobre los cubanos
corresponde ahora a la DNM, adscrita al Ministerio de Seguridad Pública.
La embarcación Plástico I, en la cual viajaron los cubanos
--propiedad del gobierno de la isla-- permanece retenida por las autoridades
costarricenses en Puerto Limón, a 80 millas de San José.
Presunto espía informaba al FBI sobre Roque
El agente del FBI 'prácticamente me imploró' que le
informara sobre Roque, afirmó González a La Habana
Rui Ferreira. El Nuevo Herald
En los días posteriores de la fuga a La Habana de Juan Pablo Roque,
la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) terminó recurriendo a otro
presunto agente cubano en Miami para que averiguara qué había
pasado con su informante.
En uno de los mensajes enviados a la isla por René González,
que junto a otros cuatro hombres está siendo juzgado en un tribunal
federal acusado de espiar para Cuba, éste relata cómo fue abordado
por el agente Al Alonzo, del FBI, quien le pidió ayuda para reconstruir
los últimos momentos de Roque en EU.
"Quieren descifrar un enigma: ¿Juan Pablo fue enviado acá
clandestinamente, o cambió de idea aquí? Le dije que pensaba que
fue enviado clandestinamente'', escribió González en octubre de
1996 en un informe enviado a sus superiores en La Habana, luego de reunirse con
Alonzo en un restaurante de la Calle Ocho.
Según el informe, incautado por las autoridades durante las
investigaciones de las actividades de la "Red Avispa'', Alonzo "prácticamente
me imploró'' que le informara sobre Roque.
Su regreso a Cuba, al día siguiente del derribo de los aviones de
Hermanos al Rescate, causó una fuerte perturbación en el FBI, ya
que durante años Roque fue un informante suyo al cual pagaron $7,000 para
que reportara las actividades de la organización exiliada.
"Hablamos sobre Juan Pablo [Roque]. Dentro de lo posible, ellos están
tratando de recrear los últimos días de Juan Pablo aquí.
Quieren saber quiénes fueron sus últimos contactos antes de
irse'', narró González.
Pero las autoridades aseguran haber descubierto en 1998 que los dos eran
realmente parte de una red de espionaje y, entre otras cosas, colaboraron en el
derribo de las avionetas.
El descubrimiento debe haber sido doblemente impactante, porque Alonzo le
había propuesto a González que también espiara a Hermanos
al Rescate y el Movimiento Democracia por cuenta del FBI, pero éste se
excusó con el argumento de que no quería herir a los exiliados.
"Le dije que si alguien me daba un avión para tirarle un bomba
en la cabeza a Fidel, no estaba seguro de que informaría al gobierno
americano sobre el asunto'', escribió el supuesto espía castrista.
Aunque el agente federal dijo entender la posición de González,
insistió en que pudiera ayudarlo a detectar algún tipo de plan que
perjudicara a las organizaciones del exilio. "Muchos de estos planes son
hechos por infiltrados cubanos aquí en Miami'', dijo Alonzo, quien ha
asistido a todas las sesiones del juicio.
Hubo consenso. González dijo que lo contactaría si detectaba
algo relacionado con eso, aunque "le dije que entendiera que no sería
un informante sobre Hermanos al Rescate y el Movimiento Democracia, aunque no
estaba de acuerdo con la cruzada de Basulto contra el gobierno actual [la
administración Clinton], y creyendo que fue de algún modo
irresponsable por la forma en que manejó la situación el 24 de
febrero [día del derribo de las dos avionetas de la organización]'',
informó González al Centro Principal.
La Isla
VIVIENDA/Mas de 10,000 familias reclaman en
la ciudad de Manzanillo la autorización para fabricar sus casas. La falta
de materiales de la construcción y la corrupción administrativa
impiden estos proyectos. En los últimos años han surgido en la
periferia de la ciudad 25 cuarterías, hechas de cartón, madera y
latones, donde habitan unas 15 mil personas sin electricidad ni agua. La
penosa situación motivó a Ana Luisa Vázquez, Julia Mirabal
y Felicia Mendoza, a instalarse en la Glorieta del parque central de la ciudad,
con sus ropas y cacerolas, indicando que no volverán a los albergues
donde fueron enviadas tras perder sus casas en un incendio.
NEGOCIOS/La venta de casas a extranjeros por
parte del gobierno contrasta con las limitaciones de los cubanos para conseguir
una nueva vivienda. En el barrio de Miramar, al oeste de la capital, las
confortables mansiones expropiadas en los años sesenta son vendidas a
extranjeros por precios que oscilan entre los $50,000 a $100,000.
Carta de Cuba
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