Manuel García (SUECA).
Las Provincias, enero 17, 2001.
"Puede venir los días que él quiera''. Este mensaje
de hospitalidad tan afable corresponde al alcalde de Sueca, Alfredo Guillem, y
su destinatario es, ni más ni menos, Fidel Castro, máximo
mandatario cubano y uno de los personajes históricos más
controvertidos de las últimas décadas. Más de uno podría
pensar que el Día de los Inocentes, en el que los medios de comunicación
recogen noticias casi increíbles, ha llegado con retraso, pero ni mucho
menos es así.
Y es que el Ayuntamiento suecano, ni corto ni perezoso, ha decidido
intentar que las fiestas del próximo mes de septiembre sean especiales y
recordadas para siempre. Y qué mejor manera que invitar a Castro.
Hay que recordar quePP y Esquerra Progresista Independent-Bloc-Els
Verd, ésta última formación al frente de la alcaldía,
son quienes dirigen el Ayuntamiento de la capital de La Ribera Baixa y de dónde
ha surgido esta iniciativa, en principio sorprendente.
Uno de los actos más esperados y seguidos de las fiestas
suecanas es el Festival Internacional de Paellas. Precisamente en este festival
intervienen cada vez más restaurantes cubanos y uno de ellos, el Hostal
Valencia, con sede en el centro de La Habana, obtuvo el primer premio en una
anterior edición del concurso que reúne a miles de personas en la
capital de La Ribera Baixa.
Tal como explicaba el alcalde, algunos de los miembros de los
restaurantes cubanos que participan en este certamen pertenecen al Partido
Comunista del país centroamericano.
"Tenemos amistad con ellos y nos propusieron que podríamos
invitar a Castro a que viniera a las fiestas''. Así pues, y aunque en
principio se podría considerar como una broma, tras estudiar esta
posibilidad, y aprovechando un viaje de placer del concejal de Agricultura, José
Luis Matoses, según explicó el alcalde, éste entregó
personalmente la invitación.
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