Publicado el 29 de noviembre de 2000, en
El Nuevo Herald
Frialdad en las relaciones entre La Habana y México
Afp. La Habana
Las escrituras de Castañeda han irritado al gobierno cubano.
Las históricas relaciones entre Cuba y México se hallan en su
más bajo nivel cuando llega a su fin la era del PRI en el poder y
comienza la presidencia del conservador Vicente Fox, a cuya toma de posesión,
el próximo viernes, se espera que Fidel Castro acuda.
Si el gobernante cubano viaja esta semana a México, llegará a
un país que considera ``diferente'' a aquel con el cual mantuvo estrechos
lazos en los últimos 40 años, deteriorados durante la presidencia
del saliente Ernesto Zedillo (1994-2000), al punto de llegar al enfrentamiento
verbal.
Con la histórica salida del PRI del poder se abre una etapa de
incertidumbre de cómo serán las relaciones bajo la presidencia de
Fox, con quien Castro tiene buena comunicación, pero en cuyo equipo
figuran dos políticos considerados en la isla como viscerales
anticastristas.
Se trata del nuevo canciller mexicano Jorge Castañeda, un hombre que
irritó a La Habana con dos libros: La utopía desarmada y La vida
en rosa, una crítica biografía de Ernesto Che Guevara que ofendió
a la familia del mítico guerrillero.
El otro funcionario que molesta al gobierno cubano es Adolfo Aguilar Zinzer,
designado al frente del Consejo de Seguridad Nacional, quien no hace mucho
sostuvo reuniones con disidentes en La Habana, cuando viajó con una
delegación de legisladores mexicanos.
Ambos puestos, la cancillería y el Consejo de Seguridad Nacional, son
claves en la relaciones entre Cuba y México.
No obstante, los observadores apuestan a una recomposición de las
relaciones a partir del trato personal entre Castro, quien mantiene en alto la
bandera del comunismo, y Fox, un empresario que fue gerente de la firma
Coca-Cola, la bebida del enemigo ``imperialista''.
Castro y Fox han salido complacidos de sus encuentros personales.
``Puedo decir que la química personal entre Fox y Castro es muy
buena, se caen bien, tienen muchas cosas en común. México puede
capitalizar la enorme reserva de buena voluntad de Cuba para con México
debido a los últimos 40 años de política exterior
mexicana'', comentó Castañeda a la prensa mexicana.
Pero desde La Habana las cosas se ven con más cautela, si se
interpretan una serie de hechos bilaterales y el último discurso de
Castro en el que describió a México como un país
``diferente'', atado a sus compromisos comerciales con Estados Unidos.
Hace 12 años, cuando Castro anunció su primer viaje como
mandatario a la ciudad de México, para la toma de posesión de
Carlos Salinas (1988-94), habló de un país solidario donde conoció
al Che y desde cuyas costas partió en 1956 a bordo del yate Granma con 81
hombres para combatir a Fulgencio Batista.
Castro siempre ha valorado la posición de México como el único
país latinoamericano que mantuvo relaciones diplomáticas con la
isla cuando en la década del 60 Cuba fue expulsada del seno de la
Organización de Estados Americanos (OEA) por presiones de Estados Unidos.
En compensación, Castro mantuvo a México fuera de sus planes
de fomentar la lucha guerrillera en América Latina.
``En el único lugar donde no intentamos promover la revolución''
fue en México, ``en el resto, sin excepción, lo intentamos'',
confesó Castro en 1998.
El fin de la era del PRI en el poder coincidió con un incremento en
las tensiones entre Cuba y México, pero más por la presidencia de
Zedillo que por el propio PRI, comentaron analistas en la isla.
Para respaldar esta aseveración, destacaron la ausencia de Castro en
la ceremonia mexicana del 15 septiembre en Cuba, y su presencia, días
después, en un acto de dirigentes priístas en La Habana.
Los temas que marcaron el diferendo fueron los señalamientos de
Zedillo a la situación de los derechos humanos en la isla y la negativa
mexicana a incluir a Cuba en el Pacto de San José, por el que México
y Venezuela suministran petróleo a naciones centroamericanas y caribeñas
con pagos preferenciales.
Por la parte cubana estuvieron expresiones de Castro que hirieron la
susceptibilidad mexicana cuando dijo que México se había salido de
la línea latinoamericana y acercado al Norte, a tal punto que algunos niños
mexicanos conocían más al Ratón Mickey, personaje de Walt
Disney, que a sus héroes patrios.
Una galería fotográfica revive la Cuba del pasado
Sandra Marquez Garcia. The Miami Herald
Vaya a La Galería del Medio, una nueva galería de fotos en La
Pequeña Habana, y podrá echar allí una mirada hacia el
pasado: en las paredes, bailarines de carnaval surgen de las sombras de La
Habana de noche en fotos en blanco y negro. Los altos edificios junto al Malecón
se yerguen como monumentos a la modernidad. Escenas de la vida rural en Cuba dan
muestras de tiempos más simples.
Localizada en el 3611 SW de la Calle Ocho --entre los restaurantes
Versailles y La Carreta en La Pequeña Habana-- la galería toma su
nombre del restaurante habanero que inventó el coctel ``mojito'' y fue
sitio favorito de Ernest Hemingway.
``Como La Bodeguita del Medio es tan famosa, la gente recordará el
nombre'', declaró el dueño, Alfredo Rey.
Hace dos meses, Rey, de 65 años, y un viejo amigo suyo, Jorge
Figueroa, de 83 años, abrieron la galería utilizando negativos de
sus tempranos días como fotógrafos aficionados retratando paisajes
tropicales y la vida diaria de Cuba para concursos de fotografía. Se
convencieron de que existía un mercado para su trabajo tras vender fotos
por valor de $5,000 en un solo fin de semana durante la exhibición
comercial Cuba Nostalgia, celebrada en Coconut Grove.
La rápida respuesta de los clientes confirmó lo que
sospechaban. Rey aseguró que la galería se acomoda a una nueva
tendencia: las familias cubanoamericanas están comenzando a crear un rincón
especial cubano en sus hogares, una especie de santuario para conservar los
recuerdos de la isla.
Elio Aztiazaraín, de 45 años, un contratista de pintura de
Fort Lauderdale que se dirigió a la galería en una fría
noche pasada para comprarle a su esposa un regalo de cumpleaños, aseguró
que los planes de su familia eran transformar una pared de su salón
familiar en un tributo a Cuba.
``Venir aquí es como regresar. Pareciera como si el tiempo se hubiera
detenido'', explicó Aztiazaraín, observando las paredes de la
tienda. ``Mi esposa quiere comprar todo lo que ve aquí''.
La pareja llegó a la galería tras cenar en el restaurante
Versailles. Aztiazaraín, que salió de Cuba cuando tenía 14
años en un vuelo de la libertad, comentó que se había
emocionado mucho cuando vio una foto de la casa de un campesino rodeada por la
bruma matutina.
``Esa foto, esa misma, es de un lugar a unas 10 millas de mi casa cerca de
Cabañas. Casi que me da un ataque cuando la vi'', contó. Cabañas
apuntó que su esposa Olivia había tenido una reacción
similar ante una foto de un piano antiguo con un tapete de paño y una
cruz de madera.
``Cuando ella era niña, tenía un piano igual que ese'', aseveró.
Copias enmarcadas de ambas fotografías forman parte ahora de la
colección privada de la pareja. Otras compras recientes: una foto de la
fortaleza de El Morro tomada con la marea baja y una foto de un sillón
vacío. Pero si bien estas fotografías originales son obras de arte
para el coleccionista, las imágenes en exhibición en La Galería
del Medio tienen precio y se venden. Copias enmarcadas de 8 por 10 pulgadas
cuestan $20 y las de 16 por 20 pulgadas tienen un precio de $65.
Otras fotos originales y enmarcadas, firmadas por Figueroa, empiezan en los
$300.
Protestan por el envío de médicos
Efe. Caracas
La Federación Médica Venezolana (FMV) protestó ayer por
la intención ``ilegal y fraudulenta'' del gobierno de traer a galenos
cubanos para que trabajen en el país, como parte de un acuerdo entre los
dos países.
``Vamos a seguir insistiendo frente al país en que es un inmenso engaño
y es ilegal la pretensión de traer médicos extranjeros a ejercer
acá, sin que ellos cumplan con los requisitos establecidos en la ley
venezolana'', declaró el presidente de la FMV, Jesús Méndez.
Explicó que en Venezuela existe ``un médico por cada 450
habitantes, más del doble de lo recomendado por la Organización
Mundial de la Salud'', y que ``hay unos 12,000 estudiantes de medicina y unos
8,000 médicos desempleados'', por lo que insistió en que no se
justifica que galenos extranjeros atiendan los planes de salud nacionales.
Méndez advirtió de que la FMV acudirá ``a los
tribunales de justicia'' para rechazar la presencia de médicos de otras
naciones, ``sean cubanos, canadienses, japoneses o argentinos'', que ejerzan en
Venezuela sin cumplir con los requisitos legales.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, afirmó que acogerá
médicos cubanos como parte del Acuerdo Integral de Cooperación
suscrito entre Venezuela y Cuba el pasado 30 de octubre, para que ocupen las
vacantes en zonas rurales alejadas y en dispensarios de peligrosas barriadas de
Caracas, en las que supuestamente se niegan a trabajar los galenos locales. | 