Un total de 465 ibicencos y formenterenses y sus descendientes viven en la isla caribeña
El 22 por ciento de los 2.128 socios de la Casa Balear de Cuba son emigrantes pitiusos o descendientes suyos.
Eivissa. J. Ll. Ferrer. Diario de Ebiza. Mayo 29, 2000
Centenares de ibicencos y formenterenses abandonaban las islas todos los años a principios de siglo para emigrar a América en busca de una vida mejor. Argentina, Cuba o Argelia eran algunos de los destinos más frecuentes. Muchos de ellos regresaron a su isla natal tras haber
logrado mejorar sus ingresos o, por el contrario, haber constatado que el lugar donde habían depositado sus esperanzas no era precisamente El Dorado que anhelaban.
Hoy, muchas décadas después, cuando la emigración es ya sólo un viejo recuerdo, 465 ibicencos y formenterenses y sus descendientes viven aún en Cuba. De ellos, la mayor parte son hijos o nietos de aquellos pitiusos que desembarcaron en la perla del Caribe en
busca de trabajo, pero también sobreviven aún algunos de aquellos primeros emigrantes llegados desde este rincón del Mediterráneo.
Según un informe del Centro Balear de Cuba de finales del año pasado, los pitiusos y sus descendientes están presentes en prácticamente todas las provincias de la república.
Los 465 naturales o descendientes de las Pitiüses constituyen una importante proporción de los 2.128 asociados en la Casa Balear de Cuba, constituida formalmente en 1993.
Según este informe de octubre de 1999, en la Ciudad de la Habana residen 176 ibicencos y formenterenses naturales de estas islas o descendientes de originarios de ellas. 25 personas más están relacionadas con Formentera. El total de habitantes descendientes de Balears es en
esta ciudad de 820.
En algunos municipios concretos, como Ciego de Ávila, los naturales o descendientes de las Pitiüses son mayoría, puesto que se trata de 25 asociados, frente a 11 descendientes de Mallorca. No hay registrado ningún caso de Menorca ni de Formentera.
También son mayoría los naturales o descendientes de Eivissa y Formentera en las localidades de Las Tunas, Camagüey, Guaimaro o Santa Cruz del Señor.
La entidad que acoge a los emigrantes baleares en la mayor de las Antillas precisa en su informe que la mayor parte de los 50 emigrantes naturales de las islas "llegaron a Cuba con sus familias a raíz de la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial, quedando unos pocos
que vinieron en las tres primeras décadas del siglo XX como inmigrantes".
La precaria situación en que viven muchos de ellos ha llevado al grupo del PP en el Consell a solicitar ayuda económica para este colectivo.
Cuatro generaciones en las Antillas
Aunque el estudio no presenta por islas el desglose generacional de los emigrantes, el total de Balears queda del siguiente modo: de los 2.128 asociados a la Casa Balear de Cuba, 50 son naturales de las islas, 475 son hijos de ellos, 871 son nietos, 733 son biznietos y 19 mantienen otro grado de
parentesco no precisado. Por edades, los emigrantes baleares de Cuba contabilizados por la Casa Balear pertenecen fundamentalmente al segmento comprendido entre los 31 y los 65 años (980 sobre el total), en tanto que mayores de 65 años figuran 290 personas y, en el extremo opuesto,
existen 466 que tienen menos de 18 años. Éstos pertenecen a la última generación de descendientes. Del total de asociados, son hombres 1005 y mujeres, 1123.
© Diario de Ibiza. Fray Vicente Nicolas, 27 07800 IBIZA. informacion.ibiza@sicon.net |