Recibirán "visa de transeúnte" que les permite permanecer un año en el país
"No son perseguidos políticos, ni han dado muestras de ser víctimas de discriminación racial, religiosa o de nacionalidad", argumentó el Gobierno venezolano. Fuentes diplomáticas aseguraron que la posibilidad de que sean enviados a un tercer país
no está descartada
Gioconda Soto. El Nacional, Venezuela. Jueves 10 de Febrero de 2000 .
El gobierno de Hugo Chávez negó ayer la petición de asilo político al traumatólogo Heberto Navarro y el ginecólogo Reinaldo Colebrook, los dos médicos cubanos que llegaron en diciembre en una misión oficial de 442 especialistas en la salud
de la tragedia ocasionada por las lluvias. En medio de una gran expectativa, el canciller José Vicente Rangel anunció la decisión ayer en la mañana -luego de haber sido consultada con el ministerio de Interior y Justicia y la Fiscalía - y alegó que los dos
galenos no reúnen los requisitos para optar al asilo debido a que "no son perseguidos políticos, ni han dado muestras de ser víctimas de discriminación racial, religiosa o de nacionalidad".
Sin embargo, explicó que por "razones humanitarias" y por "vía de excepción" los médicos recibirán visa de transeúnte lo que les permite permanecer hasta un año en el país, tiempo en el cual podrán ejercer su
profesión.
El jefe de la diplomacia venezolana empeñó una vez más la palabra del Gobierno y aseguró que la seguridad de los profesionales está garantizada y que de ninguna manera "está planteada la deportación".
Dijo que el Gobierno venezolano agradece "profundamente la colaboración de médicos cubanos que rindió una labor extraordinaria" y ratificó "su inquebrantable respeto a las instituciones de asilo y de refugio" consagradas en la Constitución
bolivariana.
Desde que la petición fue formalizada en la Cancillería, Rangel aseguró que la misma se estudiaría independientemente "de afectos y afinidades" con el régimen cubano de Fidel Castro con el que Venezuela mantiene una abierta amistad, desde que el
presidente Hugo Chávez asumió el poder.
Altas fuentes diplomáticas confiaron a El Nacional que continúa abierta la posibilidad de que los dos médicos sean enviados a un tercer país, posiblemente centroamericano.
"Lo que ocurre es que ese es un trámite que puede tardar de uno a dos meses, por lo que se decidió, por lo pronto, otorgarles la visa de transeúnte".
La Habana: Cuando no sean necesarios regresarán
Mariusa Reyes. LA HABANA
La situación de los dos médicos cubanos que pidieron asilo en Venezuela ha sido manejada por las autoridades de la isla con una buena dosis de cautela y hermetismo.
Al concluir una extensa conferencia de prensa sobre la Cumbre Sur-Sur que se realizara aquí en abril próximo, y en la que no se permitió hacer preguntas sobre este y otros temas, el canciller cubano Felipe Pérez Roque se limitó a decir que "cuba y
Venezuela son países hermanos" y que como tal "estamos dispuestos, cada vez que sea necesario, a continuar brindando nuestro aporte a un pueblo hermano del que nos sentimos parte". En el momento de la declaración aún el canciller no sabía la decisión
tomada en Caracas de otorgar una "visa de transeúnte" a los galenos en cuestión.
Al ser abordado insistentemente sobre el particular, el jefe de la diplomacia cubana precisó que poco después de la tragedia provocada en Venezuela por las intensas lluvias del pasado mes de diciembre, cuba envió un contingente de 442 médicos voluntarios, muchos de
los cuales aún permanecen allí.
Consultado sobre el tiempo que se tenía previsto permaneciera esta misión en Venezuela, dijo que éstos fueron por el tiempo necesario.
"No hay fecha fija de regreso -agregó-, porque eso es algo que las autoridades venezolanas y cubanas están decidiendo. A medida que ya no sean necesarios, irán regresando", precisó Pérez Roque.
El ministro se mostró sorprendido del interés de los medios en este caso. "Como es posible que concentren toda su atención en estas dos personas -señaló- cuando en Venezuela hay más de 400 médicos nuestros haciendo una labor humanitaria
valiosa y digna de reseñar".
Koesling lamentó omisión de la Constitución
Ricardo Koesling, que asistió jurídicamente a los médicos cubanos Heberto Navarro y Leopoldo Reynaldo Colebrook, lamentó la decisión del Gobierno nacional por cuanto "no da real validez" al artículo 69 de la Constitución bolivariana, que
consagra el derecho de asilo.
El abogado afirmó que si bien es cierto que no se llenaban los requisitos establecidos en las convenciones correspondientes para responder positivamente a la petición, había que tomar en cuenta que "los ciudadanos cubanos tratan de salir (de la isla) en balsa, nadando,
remando y quizá hasta volando".
"Rangel dijo que la decisión a tomar dictaría una trayectoria jurídica en Venezuela y esto no llena los requisitos reales para ver cómo se va a tomar de ahora en adelante el asilo con la nueva Constitución", insistió.
Koesling afirmó que sus representados sabían que "era muy difícil que se les otorgara" el asilo. De allí la conformidad con la concesión de un visado de transeúnte.
El abogado aseguró que la petición de los galenos constituyó una papa caliente en las manos del Gobierno venezolano, al cual "le fue muy difícil tomar esta decisión, porque las relaciones con el Gobierno cubano son demasiado íntimas".
Reveló que además de Navarro y Colebrook, otros colegas cubanos le han pedido su asistencia para una eventual petición de asilo, pero refirió que La Habana "ya les hizo una cirugía plástica y les taparon la boca".
Navarro y Colebrook, por su parte, negaron en conversación telefónica con El Nacional tener conocimiento de compatriotas que pretendan seguir sus pasos para quedarse en Venezuela y aseguraron que no pedirán el traslado al país de los familiares que quedaron en la
isla, entre otras cosas, porque no creen que corran peligro alguno.
Los galenos permanecen en casa de compañeros del exilio cubano y se espera que hoy en la mañana acudan a la Dirección de Extranjería para concretar los trámites del visado.
Con ese documento ambos podrán emplearse en el país, pero hasta ahora no tienen nada definido al respecto. Mientras la Federación Médica Venezolana (FMV) habló de la necesidad de equivalencias para que puedan desempeñarse en la carrera, amigos
venezolanos conocidos durante las labores de rescate les garantizaron "que las posibilidades de trabajo no eran difíciles acá".
A Navarro y a Colebrook se les espantó el miedo desde ayer. Admiten que el temor a una deportación a la isla los afectó durante los primeros días, pero ahora confían en "la palabra empeñada públicamente por el canciller".
"El quedó de analizar seriamente la situación y dar una respuesta. Ahora la tenemos y espero que la Cancillería siga siendo seria", comentó Colebrook.
Aunque les gustaría permanecer en Venezuela, no descartan la posibilidad de establecerse en un tercer país, posibilidad que -según comentaron- fue conversada extraoficialmente.
Gioconda Soto
Decisión acertada
El profesor de postgrado de Derecho Internacional de la Universidad Central Héctor Faúndez calificó de acertado el rechazo del asilo a los médicos cubanos por cuanto las razones esgrimidas por éstos para hacer tal solicitud no constituyen una persecución
política, condición indispensable para que califique la figura.
"Querer quedarse aquí porque no se es feliz en cuba o porque se ganan 25 dólares mensuales son razones muy legítimas para abandonar un país, pero no para invocar asilo político. Desde ese punto de vista, me parece bastante sensata la decisión del
Gobierno, que además de negarles el asilo, les permite al mismo tiempo que permanezcan en el país", puntualizó.
Faúndez explicó que todo asilo político "es una decisión muy compleja que involucra un elemento jurídico y otro político". En este influyen "la simpatía del Estado al cual se le solicita el asilo con la causa de los que lo
requieren, así como también la amistad o enemistad con el país de origen de los solicitantes y el tipo de conflicto que pueda generarle a las relaciones internacionales entre estos dos estados el conceder o negar la petición".
No están dadas las condiciones
El ex juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y ex ministro de Relaciones Interiores, Asdrúbal Aguiar, admitió que toda solicitud de asilo requiere de una situación real de persecución, condición que hasta ahora no afectaba a los galenos que
solicitaron el amparo.
Al margen de sostener que no están dadas las condiciones necesarias para la concesión de asilo territorial a los ciudadanos caribeños, Aguiar alertó en un programa televisivo transmitido por Globovisión que el verdadero problema que se le viene encima al
Gobierno nacional: el destino de los centenares de cubanos que han ingresado a territorio venezolano en el último año.
Aguiar dijo compartir la decisión del canciller José Vicente Rangel de invocar la soberanía nacional para adoptar cualquier decisión en materia de derecho de asilo.
Señaló también que el verdadero problema de Venezuela son las relaciones con el gobierno cubano de Fidel Castro.
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