MADRID, España.- En el Día de San Valentín, que celebra el amor en todas sus formas, recordamos tres películas del cine cubano que abordan este sentimiento desde diferentes perspectivas: Una Novia para David, Clandestinos y Fresa y Chocolate.
Una novia para David (1985)
Con la dirección de Orlando Rojas y el guion de Senel Paz, el filme Una novia para David recrea la historia de un joven que se prepara para ingresar a la Universidad. Sus compañeros practican la conquista femenina como un deporte competitivo. David (Jorge Luis Álvarez), conquista a Olga, la joven más bonita de la clase, interpretada por Edith Massola, con lo que provoca celos y bromas en el resto del grupo. Ofelia (María Isabel Díaz Lago), la gordita de la clase, lo apoya en todo momento. La cercanía que va creciendo entre ambos hace que David se debata entre Olga y Ofelia.
El filme, recreado en un preuniversitario habanero de los años 60, refleja conflictos típicos de la juventud. Integraron el elenco también Francisco Gattorno, en el rol del personaje negativo y Thais Valdés, que interpreta a la amiga de Ofelia.
Clandestinos (1987)
Clandestinos, dirigida por Fernando Pérez, es un drama histórico-romántico que sigue la historia de tres jóvenes que luchan desde la clandestinidad contra el régimen de Fulgencio Batista en la Cuba de los años 50. Inspirada en hechos reales, la película relata las hazañas de estos jóvenes que sacrifican todo por sus ideales políticos.
En medio del caos y la violencia, surge el amor entre Nereida (Isabel Santos) y Ernesto (Luis Alberto García). Su amor se ve amenazado por el peligro constante y la posibilidad de la muerte.
Fresa y Chocolate (1993)
Dirigida por Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío, Fresa y Chocolate es un hito del cine cubano que ha ganado reconocimiento internacional. La película narra la improbable amistad entre David (Vladimir Cruz), un joven comunista, y Diego (Jorge Perrugorría), un artista homosexual escéptico en la Cuba de finales de siglo. Ambientada en La Habana de los años 90, la película aborda temas de homofobia, intolerancia política y amistad.
En el trasfondo de la relación entre los dos protagonistas, se desarrolla una exploración profunda del amor en sus diversas manifestaciones. Desde la pasión por el arte y la literatura hasta la compasión y el entendimiento mutuo.
Entre otros premios, la cinta obtuvo el Oso de Plata en Berlín, el Goya en España y la primera y hasta ahora única candidatura de Cuba al Óscar, donde su exhibición atizó el debate contra la intolerancia social, política y cultural en momentos en que el país enfrentaba una grave crisis económica tras la caída del bloque socialista.
Sigue nuestro canal de WhatsApp. Recibe la información de CubaNet en tu celular a través de Telegram.