La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, recibió este miércoles el premio Vaclav Havel durante la jornada de clausura del Foro por la Libertad de Oslo.
Berta Soler abraza al expresidente rumano Emil Constantinescu. Berta Soler abraza al expresidente rumano Emil Constantinescu.
La opositora cubana, agradeció a la organización por haber reconocido la labor de las Damas de Blanco y por la confianza depositada en ellas y dijo que se trata de un reconocimiento no sólo a las damas sino a toda la disidencia interna en la isla que lucha desde hace años por instaurar una Cuba democrática.
“No hay una dictadura de derecha o o izquierda, son sencillamente, dictaduras. ¡Queremos una Cuba sin los Castro!”, concluyó Berta Soler.
Václav Havel, nacido en Praga, 5 de octubre de 1936 – 18 de diciembre de 2011, fue un político, escritor y dramaturgo checo, último presidente de Checoslovaquia y primer Presidente de la República Checa.
Durante la Primavera de Praga de 1968, Havel se opuso a la invasión soviética de Checoslovaquia que siguió a estos sucesos, lo que le costó la prohibición de sus obras. Fue encarcelado en numerosas ocasiones por su defensa de los derechos humanos a lo largo de la década de 1970. Escribió manifiestos en contra de la censura y reclamando la “discusión abierta” de los problemas económicos y políticas, que, según Hável, el régimen comunista ocultaba.
Tras la caída del régimen comunista durante la Revolución de Terciopelo en septiembre de 1989, Hável fue elegido presidente de la República (diciembre de 1989), cargo que le fue confirmado tras las elecciones de 1990. Havel es ejemplo para los luchadores por la libertad.
En la ceremonia, las Damas de Blanco compartieron el premio Vavlac Havel a la disidencia creativa con el caricaturista sirio Ali Ferzat y con el activista norcoreano Park Sang Hak.
Minutos antes de la premiación, el premio nobel de literatura Mario Vargas Llosa ofreció una conferencia sobre la literatura, libertad y el poder.