LA HABANA, Cuba – No pocas son las empresas que en Cuba están luchando por un posicionamiento en el mercado. Términos en desuso como marketing, o totalmente nuevos como publicidad digital y aplicaciones móviles son utilizados a diario para intentar llegar a los posibles clientes que, con una tendencia al consumismo adquirida en los últimos años, dedican cada vez más tiempo a las pantallas de sus dispositivos móviles y las nuevas y atractivas propuestas que por esa vía reciben.
“De todas las aplicaciones que los consumidores se descargan o copian, la mitad es borrada tras un primer uso”, comentó para CubaNet el ingeniero en informática Ricardo León Aquino, quien hizo mucho énfasis en la necesidad de que los desarrolladores prueben bien sus aplicaciones antes de sacarlas al mercado. “Tienen que ser conscientes de que deben ofrecer al consumidor algo realmente interesante” nos relata el también creador de varias aplicaciones para compañías cubanas y alemanas, “los clientes solo dan una posibilidad y hay que saber aprovecharla”.
Una de las aplicaciones más exitosas realizadas en Cuba, según el criterio de León, ha sido ETECSA, una base de datos robada de la compañía de telecomunicaciones con los nombres de todos sus clientes, número de identidad, dirección particular y el número de teléfono. Esta app, ya desarrollada para sistemas operativos como Android, IOS, Windows Mobile y con una versión para PC funciona como identificador de las llamadas entrantes y como base de datos para que grandes compañías del entretenimiento como Sarao, PMM, Divino y Habana Show puedan acceder a mayor número de posibles clientes enviando mensajes de textos con publicidad.
Mucho ha intentado la empresa telefónica para impedir que la información privada de sus usuarios siga siendo develada, pero ninguna medida ha dado resultado pues cada cierto tiempo la aplicación es actualizada y vendida en el mercado negro. “Este es uno de los ejemplos de una muy buena aplicación que es usada por empresas privadas para realizar marketing, sin embargo su origen ilícito la hace inservible en un futuro organizado y con normas legales. Lo más curioso de todo es ver como la compañía aún no ha sido demandada por nadie, esto en cualquier otro país hubiese sido un escándalo” comentó el informático.
Isladentro, una guía de paladares, clubes nocturnos y muchos lugares de interés, acompañada de llamativa información visual y posicionamiento geográfico es otra de las aplicaciones que más ha ganado espacio en la capital habanera. Distribuida gratuitamente por sus desarrolladores y con versiones para sistemas operativos Android e IOS ha permitido, entre otras cosas, que el cliente establezca comparaciones entre un sitio y otro de acuerdo a sus precios y horarios, también ha insertado dentro del mercado a nuevos negocios apartados del centro de la ciudad que en muchos casos están siendo visibles por primera vez gracias a la herramienta. “Es una versión muy cubana de Google Map” comenta en tono de broma el joven, que también asegura que “desaparecerá el día que el internet no sea un problema en Cuba”.
“En el mundo real, donde el internet forma parte del día a día, las apps se utilizan cada vez más para acceder a datos que permiten tomar decisiones en tiempo real, ya sea para gestionar procesos industriales, para impartir formación o para mejorar la experiencia de los clientes”, explica León. “La experiencia de los usuarios y el rendimiento de las apps nunca habían sido tan importantes como ahora. Los líderes empresariales en Cuba tienen que mejorar urgentemente la gestión de sus aplicaciones si quieren sacar el máximo partido a sus inversiones”, concluyó.