MIAMI, Estados Unidos. — La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FDHC) incluyó en su lista de represores a la funcionaria cubana Johanna Ruth Tablada de la Torre, subdirectora general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX).
La organización señaló que Tablada es una vocera del régimen que “se dedica a difundir la propaganda oficial tergiversando la realidad cubana”.
La diplomática —graduada del Instituto Superior de Relaciones Internacionales “Raúl Roa García”— se ha convertido en el rostro por excelencia del castrismo para llevar a cabo el lavado de imagen de cara a la comunidad internacional. En esa línea, Tablada, siguiendo al pie de la letra la retórica oficial, ha culpado en varias ocasiones al gobierno de Estados Unidos de la crisis que se vive en la Isla.
“La permanencia de medidas coercitivas extremas que afectan las condiciones socioeconómicas de nuestra población. El gobierno de Estados Unidos con sus medidas de cerco extremas e inhumanas es responsable de los altos flujos migratorios desde Cuba”, sostuvo la funcionaria el pasado mes de abril tras la última ronda de conversaciones migratorias celebrada entre funcionarios de ambos países.
La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba recuerda que “el 28 de abril de 2023, hablando ante visitantes estadounidenses, Tablada dijo que los hoteles en Cuba son del pueblo y sus ganancias van a servicios públicos”, hecho que ha sido desmentido en diferentes investigaciones impulsada por medios independientes.
En entrevista ofrecida al reportero de CNN Juan Carlos López el 21 de julio de 2021, apenas 10 días después de las protestas antigubernamentales del 11J y en medio de un feroz operativo represivo, la funcionaria negó que en Cuba hubiera periodistas sitiados o personas torturadas y desaparecidas.
El expediente elaborado por la FDHC detalla que la directiva de la Cancillería cubana podría ser juzgada por el delito de difamación en virtud del Artículo 318 del Código Penal y por persecución por motivos políticos, que figura como un crimen de lesa humanidad.