GUANTÁNAMO, Cuba.- Hoy lunes 27 de junio concluye el 8vo Festival del Changüí, iniciado el 23 de junio con una gala cultural en la Plaza Pedro Agustín Pérez de Guantánamo.
El famoso trío Matamoros afirmó en una de sus canciones que Oriente es la cuna del sabroso son, pero cada vez son más los investigadores que consideran que el son surgió en esta zona del país, cuna también del nengón, el quiribá y el changüí, ritmos que tributaron enormes aportes al son cubano, algo que clama por estudios minuciosos. A la hipótesis se une la afirmación de Sindo Garay, uno de los trovadores cubanos más trascedentes, de que el tres —instrumento musical imprescindible en la ejecución del son en su forma originaria— es oriundo de Baracoa.
Más allá de las disquisiciones teóricas el changüí, a pesar de tener mucho más de cien años y ser, según afirmó Helio Orovio en el Diccionario de la Música Cubana una de las formas más antiguas del complejo musical del son, todavía se disfruta —¡y de qué manera!— en la tierra del Guaso, algo evidente en las fiestas populares y comprobado en este festival.
Elio Revé, famoso director guantanamero, se encargó de pasear el ritmo por Cuba y el extranjero. A su memoria están dedicados estos festivales. El primero se realizó en el 2008. Éste ha sido dedicado además, al centenario de Chito Latamblé, extraordinario changüicero y al sexagésimo aniversario del Charangón de Revé, la orquesta fundada por Elio.
Un festival del pueblo guantanamero
A pesar de que esta zona es una de las más atrasadas del país el guantanamero de pura cepa defiende su tierra y sus tradiciones con un orgullo y una alegría encomiables. Los carnavales y este festival, que se celebra cada dos años, resultan pruebas contundentes de tal afirmación.
La 8va edición del festival contó con la participación de relevantes músicos cubanos como Pancho Amat y su Cabildo del Son, Odelkis Revé y su orquesta y el Charangón de Revé , conducido por Elito Revé, fiel continuador de la obra de su padre. A ellos se han sumado decenas de músicos del patio, muchos de ellos desconocidos para el resto del país pero cuyo trabajo es el que mantiene vivo al changüí y cumplen un rol protagónico en el evento.
Entre las actividades más significativas estuvo el coloquio “Rafael Inciarte, simientes, paralelos y proyecciones del changüí”, realizado en el Pabellón Guantánamo y que contó con la participación de especialistas cubanos y extranjeros pues uno de los objetivos del festival es hacer coincidir aquí a intérpretes, musicólogos y promotores de aquéllos géneros y ritmos regionales del mundo que no están privilegiados por las grandes corporaciones o disqueras, según declaró el 27 de mayo de este año al periódico Venceremos, órgano oficial del comité provincial del partido único, José Cuenca Sosa, presidente del comité organizador del evento.
Muy elogiado fue el recital que ofreció el joven músico y compositor guantanamero Ernesto Oliva en la sala de conciertos Antonia Luisa Cabal el pasado viernes 24.
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Las presentaciones de Pancho Amat en la Casa del Changüí, de Odelquis Revé en la Loma del Chivo y de Elito Revé y el Charangón en la Plaza Pedro Agustín Pérez fueron disfrutadas por el público, que bailó con obras musicales que ya forman parte del patrimonio cultural del país y que en otros tiempos coparon las listas de éxitos musicales.
Pero sin lugar a dudas dos de las actividades de mayor impacto han sido la peregrinación al cementerio municipal el pasado sábado 25 y la realización del Changüí más largo del mundo.
La peregrinación al cementerio municipal es un suceso extraordinario por su impacto popular. Partió desde la Casa de la Trova Benito Odio, ubicada en una esquina del parque José Martí. Luego siguió por la calle Carretera, donde en varias esquinas estaban tocando grupos de changüí. Al llegar al cementerio, donde la comitiva era esperada por cientos de personas, los participantes se dirigieron a las tumbas de los changüiceros que dejaron una obra insoslayable para la cultura guantanamera. Luego el baile a la entrada del cementerio se prolongó varias horas a pesar del calor.
Y como está de moda hacer algo sobresaliente, los guantanameros no quisieron quedarse atrás y volvieron a incluir en el programa la realización del Changüí más largo del mundo, cuya ejecución comenzó a las 6pm del sábado 25 de junio y concluyó a las doce de la noche de ayer domingo.
Por lo visto, el Festival Nacional del Changüí se reafirma como uno de los eventos culturales más importantes de la provincia y todo parece indicar que muy pronto alcanzará relevancia internacional, pues hasta prensa extranjera hubo. Así que no me resultaría extraño ver a decenas de norteamericanos tratando de bailar a ritmo de changüí en próximas ediciones del festival porque es indudable que el ritmo goza de muy buena salud a pesar de su longevidad.