LA HABANA, Cuba, 21 de julio (Dania Virgen García, 173.203.82.38) –Desde el Combinado del Este, el recluso Yaser Rivero Boni informa sobre la rampante corrupción de los funcionarios de orden interior.
RefiereYasser Rivero: “El reeducador del cuarto piso sur, del edificio tres, en días pasados recibió la orden del jefe del edificio, el capitán Maxwell Manduley Bermúdez, de permitirle hablar por teléfono a un recluso cuya hija de 15 años se había envenenado y estaba ingresada en una sala de terapia intensiva. El reeducador le dijo al reo que, si quería hablar por teléfono, tenía que darle 5 cuc (6 dólares), porque el jefe se había marchado y él era el jefe en ese momento”.
Según Rivero Boni, este reeducador, además vende a los reclusos por 25 dólares el derecho a pasar una hora en el patio y a usar el teléfono. Además, según la fuente, los reclusos infectados del VIH SIDA, él funcionario les vende jeringuillas desechable con agujas, y los reos las utilizan para intimidar a reclusos no contaminados”.
Refiere Yaser Rivero: “En una ocasión presencié cuando otro oficial le pidió un cigarro al reeducador, y éste le respondió que no le pidiera más cigarros a él, que abriera los ojos y buscara dinero como él”.
Según la fuente, en diversas ocasiones este teniente ha sido denunciado ante el jefe de edificio, Maxwell, y oficiales de la contra inteligencia, pero siempre queda impune.