LA HABANA, Cuba, febrero, 173.203.82.38 -El pasado 20 de enero, el periódico Granma dio a conocer el arribo a costas cubanas de la plataforma semi-sumergible Scarabeo 9, para iniciar la perforación exploratoria de búsqueda de petróleo en las aguas profundas de la Zona Económica Exclusiva de Cuba en el Golfo de México.
Se sabe que la empresa española Repsol estará a cargo de estas perforaciones, pero hay informaciones sobre el asunto que el gobierno cubano no le dio a conocer al pueblo.
Una de ellas es que la propietaria de dicho equipo es la firma italiana EniSpAs, con sede en Milán, la cual tuvo que pagar 750 millones de dólares a los astilleros Saipen, de Shangai, donde se construyó.
Tampoco se ha informado aquí que en los 5 meses que duró la navegación de la plataforma desde China, desde donde zarpó en agosto del pasado año, primeramente tuvo una estancia en Singapur, donde fue dotada de los equipos más avanzados en la exploración y extracción de petróleo.
De Singapur puso rumbo a Cabo Esperanza, Sudáfrica, y desde ahí zarpó para Brasil, donde fue revisada técnicamente y se aprovisionó de combustible.
En la última semana de diciembre, esta plataforma arribó a Puerto España, capital de Trinidad Tobago, donde, con el total acuerdo de la empresa Repsol, fue sometida a una inspección de rutina por inspectores del Departamento del Interior y el Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos.
La autorización dada por la petrolera española fue con pleno conocimiento de su partner, la empresa Cuba-Petróleo (CUPET), lo que posibilitó que la inspección se realizara en un ambiente positivo. Los inspectores norteamericanos dejaron claro que su actividad estaba dirigida al control marítimo para la navegación y nunca a entablar recurso legal contra Repsol.
Llamó la atención el mutismo de la prensa oficial sobre dicha inspección, que se divulgó ampliamente por los medios internacionales. Pero es más asombroso porque la inspección coincidió con la presencia del presidente Raúl Castro en Puerto España, donde asistía a la Cumbre de la Comunidad de Naciones Caribeñas (CARICOM).
La exploración se inició a 22 millas de las costas cubanas, a la altura de la playa Santa Fe, bloque que ya Repsol había explorado, en el año 2004. Los primeros pozos se perforaran a 1 700 metros de profundidad, aunque Scarabeo 9 tiene capacidad para llegar a los 3 600 metros.
La petrolera española tiene contratados seis bloques, que abarcan 4 500 kilómetros cuadrados de la Zona Económica Exclusiva, que comparte con la noruega Statoil Hydro y la hindú ONGC.
De acuerdo con los estudios realizados por el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGC), se estima que la cuenca norte de Cuba tiene una reserva de 4 600 millones de barriles de petróleo y 9,8 billones de metros cúbicos de gas. Los datos dados por las autoridades cubanas quintuplican esta cifra, pero son puestos en duda por los científicos, de acuerdo con lo que llaman Sistema de Petróleo Total (SPT).
El pasado año, Cuba se quedó por debajo de su meta de extracción de 4 millones de toneladas de petróleo. Ese total representa 46% de su consumo nacional, que se calcula en 145 000 barriles diarios. Ese déficit Cuba lo completa con los 125 000 barriles diarios que llegan de Venezuela.
La explotación del petróleo que encuentre la Scarabeo 9, se espera que tarde 5 años en comenzar, y que, de ser positive el resultado del esfuerzo, para el año 2016 se comience a extraer unos 525 000 barriles de crudo por día, cantidad qie sería más que suficientes para el consumo local y dejaría un saldo amplio para la exportación.
Todo este proceso de exploración iniciado por la Scarabeo 9, marcha paralelo con la construcción de la base de almacenamiento de crudo en el puerto de Mariel, la reanimación de la base de súper-tanqueros, en Matanzas, y la ampliación de la refinería de Cienfuegos, cuya capacidad será de 150 000 barriles diarios.
La ampliación y modernización del puerto de Mariel, a un costo de 800 millones de dólares, es financiada por bancos y empresas brasileñas y uno de sus objetivos será servir de base logística a la actividad petrolera en la Zona Económica Exclusiva de Cuba en el Golfo de México.