LA HABANA, Cuba, 8 de octubre, 173.203.82.38 -Fue el miércoles pasado cuando visité la casa del matrimonio Pollán-Maseda. La puerta la abrió Héctor Maseda y una sonrisa franca de antiguos conocidos precedió al apretón de manos y la inmediata invitación a pasar. Laura Pollán sentada a la mesa del comedor estaba acompañada por la pareja de hermanos de lucha Berta Soler y Ángel Moya, quienes también me dieron una amistosa bienvenida.
Laura comía en la mesa y pensé que no me había saludado por eso, pero enseguida noté que no andaba nada bien de salud. No era su modo de ser habitual. Maseda me explicó que hacía días estaba afectada por fiebres, inflamación pulmonar y tenía problemas de falta de aire y cierta descompensación del nivel de glucosa, debido a la diabetes que padece. Luego de conversar acerca del asunto que me motivó a visitarlos, me despedí sin dejar de aconsejarles de acudir al médico. Me contestaron que el lunes 3 y el martes 4 la habían llevado a la consulta del médico.
El viernes 7 en horas del mediodía, me llegó el mensaje de que habían ingresado a Laura Pollán en la sala de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital docente Calixto García, cercano a la calle Neptuno donde ellos viven. Hacia allí me dirigí en las primeras horas de la noche del mismo viernes, para interesarme por su salud desgastada por tantos eventos, y supe de lo delicado de su estado.
Numerosos amigos, conocidos y hermanos de lucha se congregaron a la puerta de la entrada de la UCI. La preocupación en el rostro de todos por conocer el resultado del diagnóstico de los especialistas se tornó más profunda al saber que la falta de aire se había agravado y su estado sería calificado de muy grave luego de proceder a conectarla a aparatos de ventilación artificial.
Alrededor de la medianoche, a petición de Maseda, muchos decidimos regresar a nuestros hogares. Todos los amigos que acudimos a apoyarlo moralmente en este momento difícil por que pasa la pareja nos despedimos muy preocupados.
Al momento de redactar estas líneas (4:00 PM del sábado), me informan amigos presentes en el hospital Calixto García que los médicos califican de aguda la insuficiencia respiratoria que padece Laura Pollán. Situación que impide aminorar su estado de gravedad.
Oremos por que el organismo de Laura Pollán responda al tratamiento. Confiamos en que Dios misericordioso ayude a Laura Pollán en este nuevo desafío. La solidaridad y el afecto más allá de la adversidad se patentizan al acudir tantas personas amigas de inmediato a la puerta de la sala de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Calixto García a interesarse por su salud.