MIAMI, Estados Unidos. – El senador cubanoamericano Marco Rubio (republicano por Florida) pidió este martes al Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) que revise las actividades en Estados Unidos del grupo procastrista Puentes de Amor.
Rubio solicitó la investigación en una carta enviada al director del FBI, Christopher Wray, a raíz de la manifestación llevada a cabo este domingo por Puentes de Amor en la ciudad de Coral Gables.
En su misiva, Rubio dijo que los miembros de Puentes de Amor “actúan como agentes extranjeros no registrados de la dictadura cubana en violación de la Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA, por sus siglas en inglés)”.
“Puentes de Amor realizó una manifestación en Coral Gables, Florida, como parte de un esfuerzo coordinado del régimen cubano para sembrar división, incitar al conflicto e influir en la política exterior de Estados Unidos. El grupo también alzó banderas del movimiento 26 de Julio de Castro, abiertamente en apoyo a la Revolución Cubana que condujo a la dictadura comunista que sigue vigente en la Isla hoy”, aseveró Rubio.
“De acuerdo con los esfuerzos frecuentemente citados del Departamento de Justicia de EE. UU., FARA aumenta la transparencia en nuestro sistema democrático al revelar a personas y entidades involucradas en actividades de influencia extranjera. Como tal, solicito respetuosamente una investigación inmediata sobre Puentes de Amor, sus miembros y actividades”, también reza la misiva enviada al director del FBI.
Este domingo, exiliados cubanos se opusieron a la manifestación orquestada por Puentes de Amor y su líder, el profesor cubanoamericano Carlos Lazo.
Las movilizaciones de ambos grupos coincidieron en Coral Gables, generando un enfrentamiento verbal entre bandos. Durante la protesta, representantes del exilio cubano quemaron una bandera del Movimiento 26 de Julio, enseña portada por los defensores del castrismo.
La manifestación de Puentes de Amor tenía como objetivo exigir al gobierno de Estados Unidos el fin del embargo contra el régimen cubano, mientras que los exiliados anticastristas acusaron a los liderados por Carlos Lazo de defender los intereses de la dictadura y exigieron la libertad de los presos políticos en la Isla.
La propaganda del régimen cubano se hizo eco del suceso, asegurando que los exiliados, a quienes calificaron como “odiadores”, “incitaron a la violencia contra la caravana”.
El enfrentamiento entre ambos bandos obligó a la intervención de agentes de la policía, quienes sacaron del lugar a representantes del exilio en Miami.
“¡Se armó la gorda en Miami! ¡Los odiadores atacan a la policía de Miami! Odiadores arrestados por incitar a la violencia contra manifestantes pacíficos de Puentes de Amor”, escribió Carlos Lazo en su perfil de Facebook.
Asimismo, el activista procastrista denunció estar siendo acosado por defender los intereses de la familia cubana.
“Ellos nos llaman terroristas por llevar a Cuba medicinas y leche en polvo para niños y ancianos, nos llaman terroristas por estar a favor de la reunificación familiar y los viajes a Cuba, y nosotros estamos a favor de los puentes de amor”, expresó Carlos Lazo durante la realización de la caravana.
La manifestación del grupo Puentes de Amor formó parte de una jornada internacional promovida desde La Habana para exigir el levantamiento del embargo impuesto por Estados Unidos.
De acuerdo con la prensa estatal cubana, la jornada incluía un tuitazo con las etiquetas #EliminaElBloqueo #UnblockCuba y #PuentesDeAmor para exigir el fin de la política coercitiva unilateral y pedir que ambas partes avancen por el camino del entendimiento.
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