SANTIAGO DE CUBA, Cuba. – “¿Acaso será justo quitarles sustento económico y alimenticio a 5 niños por capricho de decomisar un camión para dar el ejemplo a otros camioneros en Cuba?”, pregunta Adaysi Galván luego de denunciar a través de la red social Facebook el decomiso arbitrario de un camión particular utilizado para la transportación de pasajeros en Santiago de Cuba.
De acuerdo con Galván, el dueño del camión -de quien no reveló detalles- fue vinculado a la compra de combustibles en el mercado negro y llevado a tribunales meses atrás, donde se le realizó un juicio amañado en coordinación con el fiscal Yosbani Wilson Zulueta, y un coronel, que participó como testigo en el proceso, pero que según indica la joven, fue el máximo responsable de la compra ilegal de petróleo, y que hoy goza de total libertad.
“El fiscal decomisó el camión cuando este estaba roto en el garaje, y lo vino a buscar el personalmente a la casa, después de dos meses de haber empezado el proceso. El fiscal puso como testigo a un coronel, para quitarle responsabilidades, pero es el máximo responsable del hecho. En el juicio ellos estaban de besos y abrazos con los del tribunal, ahora como se llama eso, si no es corrupción y abuso con el sector privado y sobre todo con ese padre de familia con 5 niños, menores de edad y que uno tiene 10 meses de nacido. Pedimos justicia, y que devuelvan el camión a su dueño”, refiere Adaysi.
Por otro lado, Ernesto Núñez, cercano a la familia víctima de la presunta injusticia, manifestó: “…es muy fácil taparle la fachada a un miembro que debe velar por recursos de este país, mas, sin embargo, malversa y desvía esos recursos, mientras un padre de familia, con muy buena reputación y dueño del camión decomisado, es el culpable del delito que realmente no cometió. Su carro estaba en el momento del proceso roto y no se encontró petróleo ninguno en este. Hasta cuándo vamos a ser las víctimas de este país, que no tiene justicia”.
Adaysi Galván sostiene que todo fue una trampa para justificar el desvío de petróleo del supuesto coronel y apropiarse del vehículo.
“Por favor, pido que todas las personas que vean esto sepan de las injusticias en Santiago de Cuba, y del fiscal corrupto que quiso apoderarse del sacrificio de un padre de familia. Lo peor es que no estuvo involucrado con nada del delito. Pido justicia y que el mundo sepa que en Cuba ya no hay derechos humanos”, selló.
El Ministerio del Interior (MININT) detectó en la primera mitad de este año 25 casos relacionados con la malversación de combustible en su mayoría en el municipio cabecera Santiago de Cuba, así como en Songo-La Maya, Mella y Palma Soriano, alcanzándose a confiscar 5 200 litros de petróleo, 1 505 de keroseno, 411,5 de gasolina, 85 de alcohol y 1 370 de aceite de motor.
En un domicilio del municipio de Contramaestre fueron ocupados 11 tanques con un total de 2 340 litros de petróleo y otros cinco depósitos con 924 litros de aceite de motor. El acusado había comprado el aceite de motor al administrador de una cooperativa, por lo que se procedió a la ocupación de la vivienda y un camión.
A partir de los incidentes, la Fiscalía General de la República procedió a realizar auditorías en las principales empresas de la provincia, encontrando en la UEB Combinado Lácteo, uno de los mayores faltantes de combustibles (19 883 litros) donde la responsabilidad recaía en sus dirigentes.
Los casos de decomisos de vehículos utilizados en la transportación de pasajeros han tenido un ligero aumento en Santiago de Cuba, luego de que se impusieran medidas para controlar la procedencia del combustible.
Transportistas privados se ven obligados a mostrar comprobantes que especifiquen donde y cuando se adquirió el combustible, de no ser así estarán sujetos a multas y en el peor de los casos al decomiso.
Sin embargo, ante los altos precios del petróleo (1 CUC el litro en la red de Cupet en el país) y la escasez producto de la llamada “Coyuntura Energética”, los privados se han visto forzados a arriesgarse y adquirir el combustible de manera ilegal para poder mantener sus negocios.
Así lo confiesa un chofer de la ruta Santiago-Palma Soriano, contactado por CubaNet.
“Cada vez hay menos petróleo en Cupet, además de lo caro que está. Para poder seguir este negocio nosotros lo conseguimos donde sea y nos arriesgamos porque es nuestra forma de buscarnos la vida. Si no tiramos pasaje, no comemos. El desvió de combustible siempre ha estado y va estar, porque mientras no se abastezca y se le baje el precio, siempre va a haber quién se lo roba de las empresas y lo vende en la calle a precios más económicos”, alegó el emprendedor.
Recibe la información de Cubanet en tu teléfono a través de Telegram o WhatsApp. Envíanos un mensaje con la palabra “CUBA” al teléfono +1 (786) 498 0236 y suscríbete a nuestro Boletín dando click aquí.