MIAMI, Florida.- El abogado de la familia del fallecido pelotero José Fernández dijo este miércoles que en la investigación de la muerte de la estrella de los Marlins se crearon y manipularon evidencias.
“La justicia está por llegar. No sé qué hay detrás de esta creación y manipulación de pruebas, pero lo hicieron por hacerle maldad [a Fernández]”, dijo Ralph Fernández durante una rueda de prensa en Miami, asegurando que se va a hacer “justicia a la memoria” del pitcher cubanoamericano y saldrá a la luz “quién metió mano en el caso”.
El abogado añadió que la investigación y el informe de la Comisión para la Conservación de la Pesca y la Vida Silvestre de la Florida (FWC) “fueron un engaño” y dichas autoridades “manipularon la investigación”.
“La verdad tiene que salir a la luz”, acotó Ralph Fernández, quien está considerando pedir una investigación independiente de la muerte del pitcher, que falleció en un accidente marítimo en septiembre del 2016.
Maritza Fernández, madre del pelotero, dijo sentirse decepcionada por la petición de los Marlins de retirar todas las cosas de su hijo del estadio.
“Tuve que recoger todas sus cosas. No tengo palabras para describir cómo me siento. Quitaron hasta la pared en la que miles de personas le escribieron en homenaje”, dijo la mujer.
Todas las promesas de los Marlins de que le iban a hacer una estatua y a nombrar una calle con el nombre de su hijo fueron “mentiras”, añadió la mujer. Sin embargo, una fuente de los Marlins consultada por El Nuevo Herald dijo que “el equipo no hizo ninguna promesa de mantener el casillero de Fernández intacto o de nombrar una calle con su nombre”.
Tanto la madre del pelotero como su abogado dicen estar convencidos de que Fernández no consumía cocaína.
“Todas las pruebas las alteraron para que pareciera que José Fernández iba manejando el bote. Todos los reportes iniciales desaparecieron, los borraron. Que José Fernández tomaba, iba de fiesta, yo lo creo, pero cocaína jamás“, dijo el abogado.
El informe de la FWC dice que Fernández tenía un nivel de alcohol en la sangre de 0,167, el doble del límite legal, y que estaba borracho. El pitcher de los Marlins había consumido cocaína y conducía el bote a exceso de velocidad.
El abogado dijo en los registros judiciales del caso que José Fernández tenía un nivel de alcohol en la sangre de 0,147, aún por encima del límite legal de 0,08 por ciento.
Por su parte el vocero de FWC, Robert Klepper, dijo al Miami Herald que la agencia no tenía ningún comentario luego que el abogado presentó el 2 de abril un documento de 167 páginas en el Tribunal de Circuito de Miami-Dade alegando que los investigadores de dicha agencia concluyeron erróneamente que Fernández tuvo la culpa cuando su bote se estrelló el 25 de septiembre de 2016.