MADRID, España.- Como cada año, este 11 de marzo España recuerda a las 192 víctimas mortales y casi 2000 heridos por los atentados ocurridos en Madrid en 2004; la mayor masacre terrorista de la historia del país europeo.
Entre las 7:36 y las 7:40 de la mañana de ese día terroristas de una célula de Al Qaeda hicieron estallar trece bombas en cuatro trenes regionales de Cercanías en diferentes puntos de Madrid.
Tres de las bombas explotaron en un tren situado en la estación de Atocha, una de las más importantes de la capital española.
El atentado ocurrió tres días antes de las elecciones generales. El Gobierno saliente era el de José María Aznar, que había incorporado a España a la coalición de países que apoyaron a Estados Unidos en la guerra de Irak.
Con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y tras un largo juicio que concluyó en octubre de 2007, se condenó a 21 personas, pertenecientes a un grupo de extremistas de inspiración yihadista.
La nacionalidad de las víctimas del atentado del 11 de marzo de 2004 en Madrid: 130 españoles, 16 rumanos, siete ecuatorianos, 12 búlgaros, cuatro polacos, siete peruanos, dos colombianos, dos dominicanos, dos hondureños, dos marroquíes, dos ucranianos, un brasileño, un chileno, un filipino, un guineano, un francés y un cubano.
El cubano que falleció víctima de estos atentados fue Michael Michell Rodríguez, de 27 años de edad. El joven, natural del municipio habanero de Marianao, residía en el barrio madrileño de Vallecas. Trabajaba en la construcción durante el día y por la noche repartía publicidad en la puerta de una discoteca de la calle Huertas.
A raíz de estos atentados la Unión Europea declaró el 11 de marzo como el Día del Recuerdo de las Víctimas del Terrorismo.