MADRID, España.- Autor de piezas representativas de la cancionística cubana, repetidas de una a otra generación, como “No puedo ser feliz” (1954) y “Te espero en la eternidad” (1963), el compositor, pianista, instrumentista y director de orquesta Adolfo José Guzmán González, nació en La Habana el 13 de mayo de 1920.
Empezó a estudiar piano con ocho años, más tarde recibió clases de armonía, instrumentación y composición. Inició su vida artística profesional como pianista acompañante del cantante Floro Acosta, con quien formó el dúo Ideal, y luego en 1938, del conjunto argentino Los Románticos Gauchos.
Actuó en las emisoras radiales CMW Cadena Roja y RHC Cadena Azul; de 1943 a 1948 fue director musical de Mil Diez. A la vez, de 1945 a 1946 condujo las orquestas del Zombie Club, la del cabaret Montmartre, y la de los teatros América, Fausto, Campoamor y Teatro Nacional (actualmente Gran Teatro de La Habana “Alicia Alonso”).
Hizo orquestaciones para Ignacio Villa (Bola de Nieve) y los cantantes mexicanos Jorge Negrete y Tito Guízar. Fue Presidente del Instituto Cubano de Derechos Musicales; desde 1961, y durante lustros, se desempeñó como director musical del programa de la televisión Álbum de Cuba, conducido por Esther Borja.
A finales de los sesenta dirigió el cuarteto Los Modernistas. También guió las orquestas Riverside y Habana Casino; fundó la Orquesta de la Radio y la Televisión, que dirigió durante años. Tuvo la dirección musical de eventos importantes del país como el Festival Internacional de la Canción de Varadero. Viajó en funciones artísticas a Checoslovaquia, Francia, Canadá y Polonia.
Otras de sus inolvidables composiciones son “Profecía” (1955), “Mi corazón y yo” (1956), “Libre de pecado” (1958), “Es tan fácil mentir” (1962), “Amor, eso es amor” (1965) y “Olvido” (1971). Compuso, además, música para ballet, para aventuras como El capitán tormenta, Los insurgentes, Los tres mosqueteros; temas para piano y orquesta y tangos.
Adolfo Guzmán falleció el 30 de julio de 1976 a los 56 años de edad. En homenaje a su memoria, en 1978 se creó el Concurso de Música Cubana Adolfo Guzmán con el tema identificativo de “No puedo ser feliz”.