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Julio 12, 1999 Sindicalistas independientes cubanos en la CLAT LA HABANA, 8 de julio (Manuel David Orrio, CPI) - Los sindicalistas independientes agrupados en el Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos (CUTC) celebrarán una buena noticia el próximo 14 de julio, quinto aniversario de esa alternativa a la oficiosa Central de Trabajadores de Cuba. A diferencia de lo que les ocurrió en 1996, cuando su celebración fue interrumpida por la policía y el motivo de risa fue un cake encarcelado, en esta ocasión la causa de alegría es su admisi9ón con todos los deberes y derechos como afiliados extraordinarios a la Central de Trabajadores de América Latina (CLAT), una de las más importantes organizaciones sindicales del continente. Pedro Pablo Alvarez, presidente del Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos, confirmó la noticia en conferencia de prensa habida en la mañana de ayer en La Habana, la cual fue recibida con júbilo por los más de 200 activistas agrupados en las ocho delegaciones provinciales con que ya cuenta la organización sindical independiente, quienes aportaron sus firmas al proceso de admisión a la CLAT, declaró el sindicalista. La CLAT se fundamenta en "un sindicalismo de valores humanistas basado en la democracia, en la justicia social, en la soberanía nacional, la unidad latinoamericana, la vigencia de la libertad, la autonomía e independencia sindical… y sostiene una firme posición contra el embargo y las leyes Torricelli y Helms-Burton, así como de todas formas de limitación interna a la libertad de autodeterminación del pueblo cubano para decidir su destino", expresó en carta a Pedro Pablo Alvarez, el secretario general de la central latinoamericana, Emilio Maspero. Por lo pronto, el gobierno de Fidel Castro ha dado la callada por respuesta, no obstante haber sido notificado por la CLAT del reconocimiento. Alvarez, por su parte, estimó que aún es poco tiempo para esperar una respuesta gubernamental, pero que a su juicio ésta no se produciría, como ha ocurrido en otras tantas situaciones en que los sindicalistas independientes han presentado demandas a las autoridades, a tenor de derechos reconocidos por las leyes cubanas. "Sólo la represión ha servido de respuesta", dijo Alvarez. El código del trabajo vigente en Cuba garantiza el derecho de los trabajadores a constituir organizaciones sindicales sin pedir autorización. Pero ese derecho no parece existir para quienes aspiren a crear sindicatos fuera de la influencia del Partido Comunista, o que al menos aspiren a ópticas más ecuménicas, pero respetuosas de la tradición unitaria del movimiento obrero cubano. "Si la hoy oficiosa Central de Trabajadores de Cuba fuera independiente, estaría hecho todo", afirmó Pedro Pablo Alvarez. El presidente del Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos expresó que la admisión en la CLAT es un reconocimiento a todo el movimiento sindical independiente de Cuba, ahora en oportunidad otras organizaciones de seguir el mismo camino, ya informadas y en disposición de ser recibidas. No obstante, Alvarez llamó la atención acerca del cambio en los métodos de acción que ello implica, pues ha de pasarse de la simple denuncia de las violaciones de los derechos de los trabajadores a una labor más orgánica. Hará poco, fue disuelta la plantilla completa de un taller perteneciente a una de las fábricas de acero más importantes de Cuba por vínculos con el Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores y autoriza la reproducción de este material informativo, siempre que se le reconozca como fuente. |
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