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Enero 22, 1999
El trabajo y los trabajadores
cubanos
por Carmelo Díaz Fernández, Agencia de Prensa Sindical
Independiente de Cuba
LA HABANA, enero - El trabajo es la actividad del hombre encaminada a la
satisfacción de sus necesidades. Por consiguiente, las características
del ser humano se reflejan necesariamente en él. El trabajo humano tiene
muchas veces como objeto la producción de bienes materiales. Pero no es
lo mismo crear bienes mediante la actividad productiva, que reducir éste
a una simple actividad puramente material. La piedra labrada por un trabajador
es una piedra material, pero la actividad de labrarla es humana, si en ella está
presente el espíritu del hombre.
El trabajo humano forma parte de la dignidad de la persona que lo ejerce y
se comprometa no sólo a verlo como un medio de subsistencia, sino como
una forma de realización personal y social, el cual debe ejecutarse
siempre de manera razonable, y en un ambiente saludable y decoroso.El trabajador
cubano, envuelto entre las sombras de la desesperanza y devaluación de la
auténtica dignidad del trabajo, interpreta ese necesario despertar de
luces en nuestro mundo laboral, a través del derecho que nos asiste a una
vida digna en el plano natural, social, y por ende, espiritual; atributos éstos
que son fundamentales, y que deben ser considerados como una ampliación
hacia la libertad humana, eliminando todas las incomprensiones y dificultades en
el trabajo que el cubano encuentra a su paso.
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